La escena es espeluznante. Un vecino de Calp sorprendió este verano a un desalmado que golpeaba una bolsa contra el suelo. Algo salió disparado. Era de color blanco. El vecino se acercó y comprobó que era un gatito muerto. La persona que golpeaba la bolsa la tiró luego a un contenedor de basura. Dentro había otros dos gatitos. Seguían vivos. La Protectora de Animales de Calp, alertada por el vecino que vio, horrorizado, este episodio de maltrato animal, los rescató y llevó al veterinario, pero murieron dos horas después.
Este caso lo relata Mónica Monje, de la protectora calpina, que pide que se ponga, de una vez por todas, fin a “la atrocidad” de matar a los gatitos de una camada. Afirma que se queda helada cuando dueños de gatos le confiesan que se han quedado con uno de los recién nacidos y han sacrificado al resto. “Lo sigue haciendo mucha gente. Dicen que es algo de toda la vida. Pero hemos evolucionado. ¿Por qué no operan a la gata y la esterilizan? No tiene sentido esa crueldad”, advierte.
También dice que hay que poner el foco sobre el abandono de los gatos. Se conoce más el de los perros. Se dan muchos casos de cachorros que se dejan en la puerta de la protectora, de las clínicas veterinarias del pueblo, junto a los contenedores de basura… “En uno de los últimos casos, encontramos abandonados al padre, la madre y a los cuatro perritos, que nacieron ciegos".
“Pero los gatos todavía son más fáciles de abandonar. Y en seguida nos damos cuenta de qué gatos son domésticos y se han dejado en la calle. No se puede coger a los bebés como si fueran juguetes y luego, cuando crecen, deshacerse de ellos”.
“Hay mucho trabajo por hacer", avisa Mónica. "En Calp, el ayuntamiento nos ha dado una subvención de 8.000 euros para esterilizar a los gatos de las colonias felinas. Pero tenemos más gastos. En veterinarios, en cuidar de las colonias y en todo lo que hacemos, nos gastamos entre 12.000 y 13.000 euros al año. Es una labor que hacemos muy a gusto. Y lo más importante es que la gente se conciencie y respete y cuide a los animales”.
Mónica también muestra fotografías que ponen los pelos de punta de gatos que sufren miasis (larvas que les devoran los tejidos) en estados muy avanzados.
Relata también que han rescatado a gatos que han caído de balcones y ventanas y han sufrido fracturas. Luego hay dueños que no quieren hacerse cargo de los gastos de veterinario y prefieren que sus mascotas se queden cojas para siempre. “Les buscamos las opciones más baratas para que operen a su gato. Pero algunos optan por que se los quede la protectora y paguemos nosotros la intervención”.
Con todo, esta responsable de la protectora calpina afirma que se va avanzando. “Los extranjeros están muy concienciados. Van muy por delante de nosotros. Adoptan gatos y se los llevan a Alemania y a otros países europeos. Y no lo hacen porque sea más barato, que no lo es, ya que tienen que vacunarlos, ponerles el chip y hacer todos los trámites”.
Mónica advierte de que hay prejuicios con los gatos a la hora de adoptarlos. “La verdad es que son supercariñosos. A mucha gente le sorprende, pero es así". También plantea que en las escuelas se hagan charlas sobre protección animal.
