Posible marcha atrás en las políticas climáticas de la UE, con el apoyo de Madrid y Cataluña

Un inquietante ruido de fondo ha empezado a escucharse en los ambientes políticos europeos. Cada vez más regiones e incluso estados están cuestionando el ritmo de medidas para frenar el cambio climático o preservar la calidad del aire. De momento, la Unión Europea es la potencia líder en la adopción de políticas medioambientales y climáticas en el planeta, pero esto podría dejar de ser así si prosperan algunas propuestas tendentes a “flexibilizar” o “suavizar” esta estrategia, surgidas incluso desde la propia presidenta de la CE, Ursula von der Leyen.

Hace pocos días, von der Leyen (impulsora, ella misma, del llamado Pacto Verde europeo) comentó: “Deberíamos prestar atención a la capacidad de absorción” de los cambios ambientales por parte de la economía europea. La presidenta se refería a medidas que afectan a la potente industria agrícola y ganadera, y que abarcan muchos aspectos, incluyendo las limitaciones a las macrogranjas o la propuesta de reducir un 50% el uso de pesticidas, entre otras muchas cosas.

Los sindicatos y organizaciones del campo, que movilizan a millones de personas en toda la Unión, están expresando un malestar cada vez más grande, al considerar amenazados sus ingresos con estas baterías regulatorias.

Pero a la propuesta de von der Layen se ha unido la del presidente de la República Francesa, Emmanuel Macron, que este mismo mes presentaba una propuesta de reindustrialización de su país en la que reclama una “pausa regulatoria” en materia medioambiental. “Es el momento de ejecutar, no hay que cambiar más reglas, porque si no, vamos a perder a mucha gente por el camino”, señaló el presidente galo.

Y aún hay más: este mismo miércoles, el primer ministro de Bélgica, Alexander de Croo, se mostraba favorable a hacer una "pausa" en la legislación climática europea, al igual que Francia, en un momento en el que aumentan las voces en la Unión Europea que reclaman a Bruselas que pise el freno.

"En algún momento, tienes que tomar una decisión ¿Es hora de hacer todo al mismo tiempo?", se preguntó el primer ministro en la cadena pública flamenca VRT.

Madrid y Barcelona piden "un enfoque más realista"

Algunas regiones se han sumado al carro y piden también una mayor relajación en las normativas de esta materia. Es el caso del grupo de ciudades que forman parte de la Iniciativa Regional para la Calidad del Aire, integrada por ocho regiones europeas y en la que se encuentran Madrid y Cataluña.

Estas ciudades han planteado a la Comisión Europea “flexibilizar” el cumplimiento de los límites de calidad del aire y optar por fijar “unos topes realistas”. Se da la circunstancia de que ambas ciudades figuran entre las que más contaminadas están y por ello han recibido toques de atención (y sanciones) de las autoridades comunitarias para que reduzcan dicha polución.

El departamento de Acción Climática de la Generalitat ha transmitido a Europa Press que apoya la propuesta de Directiva de Calidad del Aire que se está tramitando, pero admite que es necesario reformular la expresión “lo más breve posible” con un “enfoque más realista para cada situación”, y teniendo en cuenta el punto de partida respecto a la emisión inicial marco, la situación meteorológica y otras condiciones.

Las ciudades de este grupo que se han mostrado disconformes con el sistema actual propusieron a la CE “desarrollar límites ambiciosos pero realistas”. La Generalitat insiste que “en ningún caso” se ha pedido rebajar los umbrales y que acepta los valores de la futura Directiva, “aunque con posibles flexibilizaciones”.

Teresa Ribera, contra la relajación ambiental

Frente a toda esta situación, el Gobierno español ha salido en defensa del marco actual. En relación a este último caso de las ciudades y la regulación de sus niveles de contaminación, la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha calificado de “indecente” la petición de la Iniciativa Regional para la Calidad del Aire.

Esta propuesta, según el Ministerio, “pone en riesgo la vida de las personas”, porque es la salud de los ciudadanos lo que está en juego, afirman fuentes citadas por Europa Press.

El departamento de Ribera considera que no se pueden relajar las medidas encaminadas a reducir la contaminación y asegura que la revisión de la Directiva de la Calidad del Aire precisamente una de las prioridades de la Presidencia Española del Consejo de la UE.

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