El Polestar 2 es el primer coche del mundo con un sistema operativo desarrollado por Google. No hablamos de Android Auto que, por decirlo de alguna manera, es una ‘aplicación’ compatible con la mayoría de sistemas nativos las marcas de coches. Nos referimos a Android Automotive, un ecosistema de infoentretenimiento desarrollado directamente por Google, que además de ofrecer todo lo que puedes tener un móvil, integra todas las funciones relativas a la conducción.

“Para poder ofrecerte una conducción realmente sencilla, necesitábamos un software fácil de usar y una conexión perfecta a Internet. Como no pretendíamos inventar la rueda, decidimos aliarnos con Google para crear el primer vehículo del mundo con el sistema operativo Android Automotive nativo. Y así es como aportamos nuestro granito de arena para una vida sobre ruedas más sencilla, segura e intuitiva”. De esta forma presenta la propia marca Polestar el sistema en su web oficial.

Aparentemente esta tecnología es igual a la de una tablet, con una pantalla principal sobre el salpicadero que presenta una ‘home’ dividida en distintos widgets configurables, para que cada usuario tenga un acceso rápido y a simple a las funciones que más utilice. Por defecto se ofrecen cuatro apartados presentados en forma de cuadrícula, destinando una a la información de conducción, otra al sistema multimedia, la tercera a la navegación, y una cuarta a la conexión con el teléfono para gestionar llamadas y mensajes. Aunque cada usuario puede configurar la pantalla para tener los widgets que más le interesen.

Lo que no es configurable y siempre estará visible en la parte superior de la pantalla vertical son cuatro accesos rápidos, entre los que destaca uno que hace único a este sistema operativo de Google. Al seleccionarlo te lleva a una pantalla en la que se concentran todas las aplicaciones que se pueden descargar directamente de la Play Store. Eso sí, tan sólo son compatibles aquellas relacionadas con la conducción y el infoentretenimineto seguro: estaciones de radio online como TuneIn; música en streaming como YouTube Music, Spotify o Tidal; aplicaciones de audiolibros como Storytel; de noticias; de podcast como Ivoox y, por supuesto, de navegación como Waze o el propio Google Maps. Por el contrario, no se pueden bajar app´s como juegos, reproductores de vídeo o redes sociales como Instagram o TikTok.

En el momento del lanzamiento del Android Automotive en España con el Polestar 2, no existen demasiadas aplicaciones disponibles en el Play Store, pero tratándose de Google, seguro que la oferta crece exponencialmente en los próximos meses.

Todas las aplicaciones se visualizan y manejan de una forma casi idéntica a como lo hacemos en nuestro móvil o tablet, por lo que su uso es súper intuitivo y sencillo. Además, contamos con comandos de voz iguales a los que empleamos con los móviles Android y con el Asistente de Google para simplemente diciendo ‘Hey Google’, poder pedirle lo que queramos al Polestar 2.

Este modelo es el claro ejemplo de que cada vez más los coches van a ser dispositivos móviles con ruedas en los que va a importar más las conectividad que las prestaciones. Las nuevas generaciones ya no pensarán en cuántos caballos tiene el coche, o si corre más o menos; estarán preocupadas por si admite tal o cual aplicación, si es capaz de replicar a con exactitud todo lo que lleva en su móvil, o si les permite trabajar con la misma fluidez que su tablet profesional cuando estén dejándose llevar por el sistema de conducción autónoma. Y en esa transformación tendrá mucho que ver Google, que ya ha dado un gran paso al frente introduciendo el por primera vez el ecosistema nativo Android Automotive en el Polestar 2.