Existen cinco ruidos que, debido a la alta sensibilidad y capacidad auditiva de los perros, éstos no soportan:
1º) Los electrodomésticos. Todos en casa hemos padecido el estado de ansiedad que provoca el ruido de los mismos en nuestros perros. De todos ellos, aspiradoras, batidoras y picadoras se llevan la palma.
2º) Los rayos y truenos que acompañan las tormentas, así como los fuegos artificiales. El ruido intenso que provocan los mismos resultan insufribles para nuestros perros.
3º) Los disparos. Solo son soportables por los perros de caza que, obligados y acostumbrados desde pequeños a escucharlos, consiguen convivir con los mismos.
4º) Los instrumentos de música son, en general, muy molestos para nuestros animales y les irritan profundamente.
5º) Las sirenas de las ambulancias, bomberos y coches de policía. Existen muchas teorías al respecto sobre su intolerancia a las mismas. Unas se basan en el parecido que tienen dichas sirenas con el aullido de un perro pidiendo auxilio y, otras, en el temor que el sonido de las mismas les puede provocar. En cualquier caso, lo que está claro es que sus frecuencias sonoras, sus bajos, graves o agudos, no son aptos para sus oídos.
