Cuando una persona arropa con su mano a un pequeño cachorro, cuando le cuida siendo un bebé y lo alimenta y lo acuna y lo duerme, surge entre ambos una amistad que no conoce límite alguno.
- Noticias de tu municipio
- Multimedia
- Clasificados
- Servicios
Cuando una persona arropa con su mano a un pequeño cachorro, cuando le cuida siendo un bebé y lo alimenta y lo acuna y lo duerme, surge entre ambos una amistad que no conoce límite alguno.