La última víctima mortal murió en enero en el Hospital Marqués de Valdecilla de Santander, según informó ayer la Consejería de Sanidad de Cantabria.

Este nuevo caso se encuentra dentro de las estimaciones posibles para España, tras la aparición de la enfermedad de las vacas locas en los años 90, explica el comunicado del Ministerio de Sanidad y Consumo.

El caso ha sido notificado a nivel internacional, confirmando que se trataba del quinto de la enfermedad nueva variante que aparecía en España.

De acuerdo con el Ministerio de Sanidad, la aparición de casos esporádicos de la enfermedad entra en las previsiones que se hicieron a nivel de toda Europa hace ya más de nueve años.

En aquel momento se pusieron en marcha las medidas correctoras, principalmente en la alimentación del ganado, para frenar la aparición de la enfermedad.

"Los hechos han corroborado que las actuaciones eran las correctas, ya que en España sólo han aparecido hasta el momento cinco casos, menos que en otros países europeos; los anteriores se produjeron en Castilla y León (tres) y en la Comunidad de Madrid (uno)".

Previsiblemente algunos casos más pueden producirse en la Unión Europea pero siempre consecuencia de lo sucedido hace ya más de una década.

El periodo de incubación de la variante de la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob, desde el posible contagio, se estima que es de entre cinco y diez años hasta la aparición de síntomas.

Ello implica que en el caso de Santander el contagio se produjo antes de que entraran en vigor las exhaustivas medidas de control establecidas por España, en colaboración con las autoridades europeas y autonómicas, tras la aparición de los primeros casos de vacas locas en el Reino Unido.

En concreto, desde el primer momento se localizaron y prohibieron los piensos de origen animal o con proteínas animales, se estableció el sistema de eliminación de animales infectados, se fijaron las partes cárnicas que no podían destinarse a consumo humano para introducir las máximas garantías en el consumo.

Estas medidas de prevención y control, que siguen vigentes, garantizan que la carne que se consume en España reúne "todos los requisitos de seguridad", añade Sanidad y Consumo.

Existen cuatro tipos de enfermedad de Creutzfeldt-Jakob: esporádica, familiar, iatrogénica y variante; el cuarto tipo (variante) fue definido en 1996 a raíz de la situación producida en el Reino Unido.

Esta cuarta modalidad de la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob (variante) se atribuye al contagio a través del consumo de productos de animales ricos en tejido nervioso que, a su vez, han consumido pienso de origen animal contagiado con priones.