El juez de instrucción número cuatro de Córdoba, José Luis Rodríguez Laín, decidirá hoy sobre la libertad de José Bretón, padre de los dos menores de 2 y 6 años desaparecidos el pasado 8 de octubre en Córdoba, después de un largo interrogatorio que se ha prolongado durante cerca de cuatro horas.

El padre de los dos niños desaparecidos en Córdoba hace más de cuatro meses, José Bretón, ha insistido este jueves ante el juez José Luis Rodríguez Laín que perdió de vista a sus dos hijos la tarde del 8 de octubre, momentos antes de denunciar la desaparición a la Policía. Tras un interrogatorio que se ha alargado unas tres horas y media, según ha indicado su abogado José María Sánchez de Puerta, el magistrado habrá de decidir este viernes si accede a la petición de libertad o si resuelve mantenerlo en prisión.

En concreto, fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) han confirmado a Europa Press que este viernes el juez estudiará la petición de libertad presentada por la defensa y tomará una decisión, tras la sesión de este jueves celebrada en el Juzgado de Instrucción número 4 de Córdoba, que ha durado unas cuatro horas, hasta las 21,00 horas, y a la que también ha asistido la abogada de la madre, Ruth Ortiz, como acusación particular.

Durante dicho tiempo en las puertas de los juzgados se han congregado numerosos medios de comunicación, así como personas que han increpado al abogado y al furgón policial en el que ha entrado y salido Bretón. Ante estos abucheos, el abogado ha decidido no comparecer ante los medios de comunicación al finalizar la sesión, si bien ha atendido en la estación de ferrocarril de la capital, pasadas las 22.00 horas.

En relación a la prueba pericial sobre el vídeo que certifica "al 98 por ciento" que los niños no llegaron al parque, Sánchez de Puerta ha destacado que "es una temeridad marcar el 98 por ciento cuando no existe ese resultado", y es que, a su juicio, "las técnicas son obsoletas y pierden su validez al tratarse de fotografías manipuladas", aunque dicha prueba consta en el sumario.

Al respecto, detalla que "la peritación es una opinión de un señor particular, cuya misión es vender programas informáticos a la Universidad de Valencia, que no dice la titulación que tiene, ni ha comparecido en calidad de perito y trabaja con un sistema obsoleto", y las imágenes "tienen mala calidad, son fotografías manipuladas y han perdido el valor procesal".

Ante esta circunstancia, se ha pedido un contraperitaje que realizarán dos ingenieros de telecomunicaciones y cuyos resultados se esperan para la semana que viene, en la cual también se prevé que el juez levante por completo el secreto de sumario.

Por otra parte, ha explicado que a Bretón le han preguntado por "contradicciones" en su declaración y él ha respondido a "todo" y sigue defendiendo su versión de que en la mañana de los hechos estuvo en casa de su hermana entre las 11.00 y las 13.00 horas y por la tarde, tras estar en la parcela de Las Quemadillas, fue junto con sus hijos al Parque Cruz Conde, donde los perdió de vista sobre las 18,00 horas.

No obstante, según el letrado, la Fiscalía con los indicios que tiene se ve "en la obligación de mantener la prisión", si bien este viernes el juez decidirá si permanece interno o no en el Centro Penitenciario de Alcolea, en el que se encuentra desde el 21 de octubre imputado por los delitos de detención ilegal cualificada por desaparición de menores y otro de simulación de delito.

En relación a las búsquedas de las últimas semanas de la Policía Nacional en Las Quemadillas, en la parcela de los abuelos paternos donde estuvo con los niños antes de denunciar la supuesta desaparición, el abogado reitera que "esa zona está muy trillada".

El cuadro cronológico que defiende el padre de los niños es que el día 7 de octubre los recogió en Huelva y el 8 de octubre estuvieron en casa de su tía en Córdoba desde las 10.00 hasta las 13.30 horas, cuando el padre los recogió en coche y fueron a casa de sus abuelos. Sobre las 13.45 horas, el padre y sus hijos se dirigieron hacia la parcela de Las Quemadillas, donde permanecieron hasta las 17.30 horas, y de allí fueron al Parque Cruz Conde, donde el padre los perdió de vista y desaparecieron, según relató en su momento su abogado, José María Sánchez de Puerta.

Antes de salir de la finca, el padre, que según el letrado, "nunca apagó el teléfono móvil, aunque estuvo sin cobertura unos 20 o 25 minutos", realizó una llamada a su hermana para quedar en el parque y posteriormente en el citado parque, Bretón realizó tres llamadas a sus dos hermanos, así como a la Policía y al Servicio de Emergencias del 112 para alertar de la desaparición.

Así, indicó Sánchez de Puerta, los dos hermanos y el padre estuvieron buscando en el parque y zonas aledañas hasta por la noche cuando fueron a Comisaría a denunciar, porque lo aconsejaron los agentes de Policía.

Los agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada, antes de la prueba pericial, ya habían hecho dos reconstrucciones, una con muñecos y otra con niños de carne y hueso, para probar que si Ruth y José hubieran ido en el coche, la cámara habría recogido su imagen como hizo con la de su padre. El abogado de Bretón alegó que "es imposible que las cámaras recojan ese espacio en el que van los niños", de forma que se optó por aportar una nueva pericia, que consta en el sumario.

El juez tomó la decisión de levantar parcialmente el secreto de sumario después de que hace unos días permitiera a las partes tener acceso a los informes psicológicos y psiquiátricos, que indican que la personalidad de Bretón está marcada por "rasgos excesivos de manipulación", algo que su abogado atribuye a "que todas las mentes de inteligencia superior tienden a manipular", si bien destaca que su cliente "no tiene ningún tipo de trastorno mental".

Desde el 8 de octubre los agentes han concluido sin éxito la búsqueda de pistas registrando pozos, alcantarillas y colectores de aguas residuales entre el río Guadalquivir y el citado parque, así como cerca de la parcela de los abuelos paternos, que se ha rastreado en diversas ocasiones, al igual que los alrededores de la misma, varias graveras y el río, en todos los casos sin resultados sobre el paradero de los menores.

Por su parte, la Organización Internacional de Policía Criminal (ICPO-Interpol) difunde en su web las fotos de los dos niños, junto con una ficha que reúne las características físicas de los pequeños, que también se une a la pegada de carteles que lleva a cabo la familia materna y que ha extendido a Portugal.

Entre los resultados de los informes psiquiátricos, destaca que su cliente "no tiene ningún tipo de trastorno mental", sino que "es una mente plenamente clara"; y en cuanto al informe psicológico, el abogado precisa entre las conclusiones que Bretón obtiene un coeficiente intelectual (CI) del "121 por ciento de inteligencia superior", de manera que su inteligencia es "bastante más elevada de la media normal".

Asimismo, aclara que dicho informe "reconoce y es tajante que no tiene ningún trastorno de personalidad", por tanto "se eliminan rasgos patológicos, como la esquizofrenia o la bipolaridad". Por todo ello, proclama que a efectos de la defensa "los informes no tienen ningún valor" y, a su juicio, "no es ningún problema para demostrar que es inocente", puesto que "los informes no demuestran que él haya intervenido en la desaparición de sus hijos" y "no incriminan en nada" a Bretón.

Cabe recordar que la familia materna está personada en la causa, mientras que familiares paternos de los pequeños ratificaron ante el juez la versión de los hechos que defiende el padre sobre la desaparición y creen que Ruth y José están vivos.