La Sección 10 de la Audiencia de Barcelona ha considerado probado que Convegència Democràtica de Catalunya (CDC) cobró 6,6 millones de euros en comisiones irregulares a través del Palau de la Música Catalana que Ferrovial pagaba en concepto de patrocinios pero que llegaban al partido a cambio de adjudicaciones de obra pública.

El tribunal condena por estos hechos al extesorero de CDC Daniel Osàcar a 4 años y cinco meses de prisión por un delito continuado de tráfico de influencias, delito de blanqueo de capitales en concurso medial con un delito continuado de falsedad en documento mercantil y un delito de falsedad contable, además de multarle con 3,8 millones de euros, según la sentencia hecha pública este lunes.

También han sido condenados Fèlix Millet, a nueve años y ocho meses de prisión; Jordi Montull, a siete años y medio, y Gemma Montull, a cuatro años y medio.

Según la sentencia, desde principios de 1999 hasta julio de 2009, el total de las comisiones satisfechas por Ferrovial a CDC ascendió como mínimo a 6,6 millones de euros y al expresidente del Palau de la Música Fèlix Millet y su mano derecha, Jordi Montull, de 3,5 millones.

Por eso, la Audiencia acuerda decomisar las ganancias obtenidas por CDC, por Millet y por Montull con este tráfico de influencias: 6.676.105,58 euros el primero, 2.804.716,29 euros el segundo y 701.179,07 el tercero.

Sin embargo, absuelve a los exdirectivos de Ferrovial Pedro Buenaventura y Juan Elízaga de un delito societario de administración desleal y tráfico de influencias, al haber prescrito todos los delitos.

La sentencia considera probado que Millet, Montull y su hija Gemma Montull montaron un entramado a través del Palau de la Música que permitió la destinación ilegal de más de 23 millones de euros que sirvieron para beneficio particular de los responsables del Palau y el pago de comisiones a CDC y hubo además el correspondiente fraude a Hacienda.

Según informa el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), Millet y Montull, desde diciembre de 2003, con la contribución de Gemma Montull, "pusieron en práctica una estrategia encaminada a disponer, ilícitamente, de cuantiosos fondos de la Asociación, la Fundación y el Consorcio (del Palau) para aplicarlos bien a gastos particulares de ellos o sus familias, bien a fines desconocidos".

Considera que una de las acciones a través de las que Millet y Montull buscaron y obtuvieron un enriquecimiento personal a costa de los fondos de la Asociación y la Fundación fue mediar para establecer un sistema por el que la sociedad Ferrovial, mediante el pago de comisiones a CDC, "obtenía la adjudicación de determinados concursos y licitación para la construcción de obra pública en Catalunya".

Así, los dos principales acusados pactaron con el ya fallecido extesorero de CDC Carles Torrent -"sin excluir la participación de otras personas de esta formación que no han podido ser completamente identificadas o de quien su responsabilidad penal ha sido declarada prescrita"-- que desde Ferrovial se entregaría dinero a CDC a cambio de que garantizara la adjudicación de un determinado volumen económico de obra pública anual.

Este entramado de pago de comisiones de obra pública, Millet y Montull contribuyeron a su creación, y después, con la llegada de Gemma Montull como directora financiera, a su "desarrollo, perfeccionamiento y mantenimiento", poniendo a disposición de los exdirectivos de Ferrovial y de miembros de CDC toda la estructura económica del Palau.

Así -prosigue la sentencia- pudieron "ocultar el pago y cobro", respectivamente, de las comisiones, bajo la forma de patrocinio y convenios de colaboración, y pago de facturas por servicios no prestados para el Palau.Comisiones del 4%

Según la Audiencia, la comisión que desde Ferrovial y CDC se pactó que pagaría la empresa a cambio de obra pública fue del 4% del importe del total de las adjudicaciones y se repartía del siguiente modo: 2,5% para el partido y 1,5% para Millet y Montull (y los dos responsables del Palau a su vez se lo repartían en un 80% para el primero y 20% para el segundo).

Todos estos detalles fueron confesados en el juicio que tuvo lugar entre marzo y junio por los propios Millet y Montull, que alcanzaron un pacto con Fiscalía para rebajar las penas, muy especialmente para Gemma Montull, para quien la Fiscalía pedía dos años de prisión y que finalmente ha sido condenada a cuatro años y seis meses, con lo que puede finalmente ingresar en prisión.

Además, la sentencia afirma que este "acuerdo criminal" se mantuvo ininterrumpidamente de 1999 a 2009, hasta que en julio de 2009 los Mossos d'Esquadra irrumpieron en el Palau de la Música.

Añade que las comisiones ilícitas pactadas por Pedro Buenaventura y Juan Elízaga, con Millet, Montull, Daniel Osàcar y -antes que él- Carles Torrent, con destinación a CDC se hacían llegar a la formación política de forma "enmascarada", sirviéndose de la estructura jurídico financiera del Palau.