El cementerio militar alemán de Cuacos de Yuste (Cáceres), único de estas características que existe en España, ha sufrido esta madrugada varios actos vandálicos, ha informado a Efe el alcalde la localidad, José María Hernández.

Tras condenar el ataque, Hernández ha indicado que el camposanto ha amanecido con varias pintadas realizadas en el muro exterior -han dibujado una especie de diana y una frase en la que parece leerse "Ni nazis con honores"- y con nueve cruces de enterramientos destrozadas.

El alcalde ha afirmado que los hechos ya han sido puestos en conocimiento tanto de la Embajada de Alemania en España, que se encarga de su mantenimiento a través de una asociación alemana, como de la Guardia Civil, que investiga lo sucedido.

De igual forma, el primer edil ha subrayado que se trata del primer incidente que sufre el cementerio desde su apertura en el año 1983.

En el cementerio militar alemán de Cuacos de Yuste descansan 26 militares germanos de la Primera Guerra Mundial y 154 de la Segunda Guerra Mundial que pertenecieron a tripulaciones de aviones que cayeron sobre España, submarinos y otros navíos de la armada hundidos.

Realmente, según los datos que detalla el libro "El Cementerio Militar Alemán de Cuacos de Yuste", de José Carlos Violat, Agustín Ruzafa y Francisco Javier Verdú, en el cementerio, reposan los restos identificados de 155 soldados, marinos y aviadores alemanes.

Otros 25 enterramientos no alojan restos humanos, al ser imposible localizarlos, de los que en 17 figuran sus nombres y ocho son de militares desconocidos, en las que se puede leer la inscripción "Ein Unbekannter Deutscher Soldat" (Un soldado alemán desconocido).

Algunos de ellos murieron en hospitales españoles a causa de sus heridas y sus tumbas estaban repartidas por toda España, allí donde el mar los arrojó a tierra, donde cayeron sus aviones o donde perecieron.

El Volksbund (asociación alemana encargada de velar por los cementerios de guerra alemanes) entre los años 1980 y 1983 los reunió en esta última morada y desde entonces sufraga el mantenimiento del recinto, que forma parte de la historia de la localidad de Cuacos de Yuste desde hace casi 35 años.

El cementerio, que fue inaugurado el día 1 de junio de 1983, está siempre abierto y de su mantenimiento se encarga, en la actualidad, el jardinero extremeño Isidoro Huerta.

En la entrada del camposanto, una placa invita a "recordad a los muertos con profundo respeto y humildad".