La hasta ahora presidenta del Partido Popular en Asturias, Mercedes Fernández, ha presentado su dimisión ante la dirección nacional del partido, según han confirmado fuentes del PP asturiano. Esta renuncia se produce en un momento acordado con el equipo de Pablo Casado para dejar paso a una dirección regional de transición hasta un futuro congreso, según indicaron las fuentes consultadas.

Licenciada en derecho, presidió el Partido Popular de Gijón entre 1989 y 2000. Fue diputada en las Cortes Generales durante dos legislaturas. Ejerció como Delegada del Gobierno entre los años 2000 y 2004. También fue síndica de cuentas del Principado. Fue cabeza de lista del PP asturiano en las elecciones generales de 2011 y candidata al Principado en los comicios autonómicos de marzo de 2012.

La dirección nacional del PP de la madrileña calle de Génova ya pensaba en el relevo de Mercedes Fernández al frente del partido en Asturias, aunque la decisión estaba prevista para cuando se resolviese si finalmente se producía investidura del socialista Pedro Sánchez o repetición de elecciones.

Esta decisión era esperada por el grupo parlamentario del PP asturiano, que lidera Teresa Mallada. La renuncia de Mercedes Fernández pone fin a las tensiones internas tras la decisión de Casado de que Mallada fuese la candidata autonómica en las pasadas elecciones, en lugar de Mercedes Fernández, quien aspiraba a continuar como cabeza de cartel. Se abrió así una batalla interna a la que la ejecutiva nacional ha querido poner fin una vez se despeje el panorama del futuro gobierno nacional.

Mayoría centrada

El líder del PP, Pablo Casado, se ha ofrecido este lunes para "liderar una mayoría centrada con un calendario de ambiciones nacionales" ante las próximas elecciones generales del 10 de noviembre y ha defendido la "unión" en torno al Partido Popular. Además, ha subrayado que las "prioridades" de Ciudadanos y Vox se han "alejado" de las de sus votantes.

En su intervención ante el Comité Ejecutivo Nacional del PP, con la presencia de todos los 'barones' territoriales del partido, Casado ha afirmado que "hay que hacer política para ganar" y ha añadido que eso pasa por "unir en las urnas un voto que, puede no ser idéntico", pero que es "mayoritario su anhelo de libertad y solidaridad social intergeneracional" o su "deseo de restaurar la confianza entre españoles".

En este punto, ha llamado a llegar a acuerdos en el seno del centro-derecha porque las consecuencias de esa división son "letales" para España. Según ha recordado , el PP ha ofrecido fórmulas "abiertas de convergencia electoral" que han sido "rechazadas" por Cs y Vox. "Creo sinceramente que en este momento sus prioridades se han alejado ya mucho de las de sus votantes", ha enfatizado.

Casado, que ha denunciado el "funambulismo político" de Pedro Sánchez, ha avisado que la fractura del centro-derecha "significa desandar el camino histórico" que les llevó a la mayoría electoral y al Gobierno de España. "Unir para ganar y ganar para unir España. Por eso, tenemos que abordar sin reserva y sin disculpas el problema de la división del centro-derecha", ha proclamado.