El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha sido recibido este sábado con pitos y abucheos a su llegada al desfile del 12 de octubre con motivo del Día de la Fiesta Nacional.

Como ya ocurriera el año pasado, el público situado en la zona más cercana a la tribuna de autoridades, en la plaza de Lima de Madrid, ha abucheado a Sánchez cuando el presidente ha bajado de su vehículo oficial. Este recibimiento ha contrastado con el entusiasmo con el que el público ha acogido a los Reyes Felipe y Letizia acompañados por sus dos hijas, la Infanta Leonor y la Princesa Sofía.

El coche del presidente en funciones ha llegado por un lateral del paseo de la Castellana y no ha sido anunciado por megafonía. En contraste, los vehículos del monarca y su familia sí han recorrido los dos kilómetros por los que transcurre el desfile anunciados por los altavoces.

La ciudadanía de Madrid ha llenado de banderas de España desde primera hora de la mañana todo el recorrido del desfile, en el que participaron unos 4.200 efectivos, 76 aeronaves y 150 vehículos.