El diálogo social para prorrogar las ayudas a los ERTE hasta el 30 de septiembre se ha reactivado este jueves después de que el Gobierno que sindicatos y patronal esperan que plasme por escrito para poder seguir negociando la próxima semana.

Según fuentes del diálogo social, el Gobierno ha aceptado el planteamiento de los agentes sociales de exonerar los ERTE por causas objetivas (económicas, técnicas, organizativas y de producción), porque son los que empezarán a utilizar las empresas con dificultades una vez que vayan desapareciendo los ERTE por fuerza mayor como consecuencia del levantamiento del estado de alarma.

El Gobierno ha mantenido el esquema de reducción progresiva de las ayudas planteado hasta el momento, primando la reincorporación a la actividad, aunque se ha mostrado dispuesto a revisarlo después de que tanto empresarios como sindicatos le hayan pedido que se deje de subvencionar la vuelta al trabajo de los empleados.

En el anterior acuerdo para prorrogar las ayudas hasta el 30 de junio el Ejecutivo quiso incentivar en mayor medida la recuperación de trabajadores, en lugar del mantenimiento de la suspensión, lo que según los sindicatos ha provocado que "se regale el dinero" a los empresarios que están en condiciones de retomar la actividad y el empleo.

Para el secretario de Política Sindical de UGT, Gonzalo Pino, la reunión de hoy ha ido mejor que la de ayer "pero solo parcialmente", porque -según ha dicho a EFE- el Gobierno acepta la idea de exonerar los ERTE por causas objetivas "pero manteniendo una reducción tal de las ayudas que no es atractiva" para que las empresas salven el empleo.

Al respecto, Pino cree que hay margen para mejorar los porcentajes de exoneración de cuotas propuestos por el Gobierno si se trasladan las ayudas por la reincorporación de trabajadores a las empresas que de momento no pueden recuperarlos.

En el mismo sentido, la secretaria de Acción Sindical de CCOO, Mari Cruz Vicente, ha dicho que el acuerdo es posible pero falta que el Ministerio de Seguridad Social modifique el esquema de exoneraciones para ayudar en mayor medida a las empresas con trabajadores en ERTE, en lugar de a las que los sacan de un ERTE, un cambio que considera que no supondría un gasto añadido.

En declaraciones remitidas a los medios, Vicente ha resaltado como positivo de la propuesta del Gobierno que se prohíben las horas extraordinarias y las externalización de trabajo a las empresas con ERTE.

Asimismo, ha valorado que existe la posibilidad de abordar otras medidas como la mejora de la protección para quienes perdieron un empleo y no proceden de un ERTE, pero han tenido dificultades para encontrar trabajo en la situación actual.

El Ministerio de Trabajo, que encabeza la negociación por parte del Ejecutivo, se ha limitado a confirmar que se ha puesto sobre la mesa una nueva propuesta con flexibilidad negociadora.