El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, defenderá en el Consejo Europeo que comienza este jueves en Bruselas que las ayudas de estado que la UE puso en marcha por la pandemia del coronavirus se extiendan más allá de este año hasta que la recuperación económica se haya consolidado.

Sánchez viaja mañana a la capital belga para acudir a esta reunión extraordinaria de los Veintisiete que en su primera jornada, no obstante, se centrará en la política exterior y sobre todo en la crisis del Mediterráneo oriental, un asunto para cuya resolución el jefe del Ejecutivo ha defendido siempre un diálogo honesto entre las partes.

Además de participar en esta cumbre extraordinaria Sánchez tiene previsto mantener dos reuniones bilaterales, una con el presidente del Consejo, Charles Michel, y otra con el negociador jefe del Brexit Michel Barnier.

Esta cumbre extraordinaria debía haberse celebrado la semana pasada, pero se aplazó por la cuarentena que debió guardar Michel tras haber estado en contacto con un contagiado por Covid-19. Aunque en realidad debió haberse celebrado mucho antes, en marzo, pero se suspendió a causa de la pandemia.

La que iba a ser una reunión estrictamente económica versará en mayor medida, al menos durante toda la primera jornada, sobre política exterior y cuestiones como la situación en Bielorrusia o la tensión entre Grecia y Chipre con Turquía a cuenta de las prospecciones marítimas y de la discusión sobre sus zonas económicas exclusivas.

Fuentes del Gobierno han subrayado el papel que Sánchez ha tenido en la mediación que ha habido a varias bandas para conseguir rebajar las tensiones, así como su implicación para ayudar a resolver este conflicto que se ha suavizado en los últimos días, entre otras cosas por el reciente compromiso de Grecia y Turquía de retomar conversaciones exploratorias interrumpidas en 2016.

El presidente del Gobierno subrayó la semana pasada en Bruselas -a donde viajó al mantener su agenda con varias reuniones bilaterales a pesar del aplazamiento del Consejo- que sólo mediante un diálogo honesto y directo entre las partes se puede encontrar una solución, primero una desescalada y, después, una discusión abierta sobre las controversias.

Este jueves también hablarán los Veintisiete de la situación en Bielorrusia o del conflicto entre Armenia y Azerbaiyán por su disputa del territorio de Nagorno-Karabaj. Será el viernes, en la segunda jornada de la cumbre, cuando se discutan cuestiones económicas.

Fuentes del Gobierno explican que con la pandemia el enfoque de este debate también ha cambiado, y los cuatro pilares sobre los que se va a sustentar serán la profundización del mercado interior, la necesitad de una política industrial ambiciosa, la revisión de la política de competencia y el impulso de la digitalización.

Y será en este punto en el que Sánchez quiere hacer su petición sobre las ayudas de Estado de la UE, aunque esta cuestión, en concreto, no figure entre los temas propuestos por Michel. Sánchez defenderá que se extienda el marco temporal de ayudas más allá de lo previsto -finales de este año- y hasta que la recuperación económica se haya consolidado.

Entienden en Moncloa que para que dicha ampliación se produzca es posible que tengan que modificarse los instrumentos que hacen posibles esas ayudas o limitarse a determinados sectores, pero insisten en que deben mantenerse por un tiempo más prolongado.

Al menos, insisten, mientras continúe la pandemia y hasta que la recuperación sea un hecho, de forma que mientras se pueda seguir ayudando a las empresas de los estados miembros a sobrellevar esta coyuntura.