El ministro español del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha descartado este viernes el traslado de inmigrantes desde Canarias hacia la Península y lo vinculó con "las políticas migratorias, que son del conjunto de la UE, y no solo de España".

"Cuando se habla de traslado a la península, digo: Hay que luchar contra la emigración irregular, y evitar que se establezcan vías de entrada irregular a Europa", declaró Marlaska al término de su visita en Rabat, donde se reunió con el ministro del Interior, Abdeluafi Laftit.

El ministro respondía así a la petición que han hecho los socios de gobierno de Unidas Podemos, así como las autoridades canarias, para activar esos traslados ante la presión migratoria que sufren las islas y que solo en el último mes contabilizado ha supuesto la entrada de más de 9.000 inmigrantes irregulares en Canarias.

Marlaska insistió en varias ocasiones en que "la política migratoria es integral", e incluye colaborar con los países de origen y tránsito de los emigrantes, luchar contra las mafias y devolver a los irregulares a sus países.

Del mismo modo, insistió en que las personas con derecho a protección o situación muy vulnerable tendrían un trato preferencial, pero no la totalidad de los que llegan irregularmente.

Y así, con respecto al eventual traslado de inmigrantes de Canarias para descongestionar la situación de las islas, fue muy claro: "Hay que evitar que se establezcan vías de entrada irregular a Europa (porque) la política migratoria es del conjunto de la UE y no solo española".

Repatriaciones a Mauritania y Marruecos

El Gobierno ha reactivado, tras un parón por la pandemia, las repatriaciones de inmigrantes irregulares desde Canarias hacia Mauritania y hacia Marruecos, aunque en este caso ha sido de manera muy limitada por las restricciones de movilidad contra la Covid-19 que rigen en el país.

Fuentes diplomáticas han reconocido que la cooperación con Marruecos en este ámbito tiene un amplio margen para mejorar y confían en que la visita del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que se encuentra este viernes en Rabat, contribuya a reactivar esta cooperación en los próximos días.

Con Mauritania, en cambio, hay más repatriaciones y a mayor ritmo. Las fuentes, que no han facilitado más detalles, han insistido en que esta 'diplomacia de retornos' es una cuestión muy delicada también para los países que acogen a los retornados y sensible para sus opiniones públicas.

En tercer lugar, el Gobierno está trabajando para activar las repatriaciones con Argelia, que es el origen de la amplia mayoría de las llegadas a España por el Mediterráneo.

En lo que va de 2020, hasta el 15 de noviembre, han llegado a España 33.946 personas, alrededor del 57 por ciento de todas las llegadas irregulares a la UE. Algo menos de la mitad de esas llegadas, 16.760, han sido a Canarias.

Las fuentes consultadas han insistido este viernes en que la gestión de la migración, con el foco ahora en Canarias, es una tarea en la que está coordinado todo el Gobierno, y en particular los cuatro ministerios más concernidos: Interior, Exteriores, Inclusión y Política Territorial.

Además, la agencia europea de fronteras, Frontex, ha enviado a Gran Canaria dos equipos para ayudar en tareas de identificación y proceso de solicitudes, un total de siete personas, según fuentes de la agencia.