El Gobierno de Pedro Sánchez ha decidido cancelar a partir del martes los vuelos desde el Reino Unido salvo para ciudadanos españoles y residentes, como respuesta a la nueva cepa del coronavirus que padece el país británico, mucho más contagiosa. Tras la cascada de suspensiones de conexiones aéreas decretada por más de 10 países europeos, entre ellos Francia, Alemania e Italia, el Ejecutivo había querido esperar a que la UE diese una respuesta "común", limitándose a reforzar el control de verificación de pruebas PCR en aeropuertos y puertos, pero este lunes ha anunciado que se sumaba a la cancelación de vuelos, algo que también pedían varios presidentes autonómicos y la oposición.

Por su parte, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha remitido cartas al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y a los responsables de las compañías aéreas que operan en los aeropuertos de Alicante-Elche y Manises, recordándoles que la Comunidad Valenciana está cerrada desde hoy por las medidas para la contención del covid. De esta manera, Puig pide colaboración para frenar la llegada de extranjeros, porque la competencia es estatal.

En las misivas remitidas a todas las compañías aéreas que vuelan a la Comunidad, el presidente de la Generalitat ha recordado que las restricciones entran en vigor a partir de hoy y solicita que difundan a sus clientes las citadas medidas para que los viajeros que cumplan las excepciones recogidas en la normativa justifiquen debidamente la entrada y se eviten así un viaje "que devendría inútil" al no poder entrar en territorio valenciano.

Decisión estatal

La decisión del Gobierno se ha tomado de forma concertada con Portugal. "Tras la reunión del mecanismo de crisis de la Unión Europea, que hoy ha analizado los efectos de la nueva cepa del coronavirus detectada en el Reino Unido y ha pedido que se eviten los viajes no esenciales, el Gobierno ha decidido suspender desde mañana las entradas en territorio español de ciudadanos procedentes del Reino Unido, salvo nacionales españoles o residentes en España", han señalado fuentes de la Moncloa.

"La medida ha sido tomada después de que se haya expuesto en Bruselas la necesidad de tomar medidas coordinadas, tal y como reclamó ayer España. La decisión de España supondrá también un reforzamiento de los controles en el paso fronterizo de Gibraltar", continúan las mismas fuentes, después de que el Gobierno de Boris Johnson confirmara que se ha detectado la nueva variante del coronavirus en el Peñón, donde las restricciones también se han endurecido tras el repunte de contagios durante la última semana.

"El presidente del Gobierno acaba de mantener una conversación sobre estas decisiones comunes con su homólogo, el primer ministro luso Antonio Costa. Asimismo, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha dialogado con su colega, la ministra portuguesa de Sanidad, Marta Temido. Por su parte, la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, informará de inmediato de la decisión al gobierno británico y a la Comisión Europea", concluyen en el Ejecutivo.

Países Bajos, primer país en cerrar

El primer país en aplicar el cerrojazo tras el anuncio de la cepa fue Países Bajos, desde las 6 de la mañana de este domingo 20 de diciembre y hasta el próximo 1 de enero. "El Gobierno está siguiendo de cerca la evolución en el extranjero y considerando medidas adicionales respecto a otros modos de transporte. En los próximos días, junto con otros estados miembros, Holanda explorará la posibilidad de limitar aún más el riesgo de que la nueva cepa llegue del Reino Unido", indicó en un comunicado el Ejecutivo que lidera Mark Rutte que también suspendió las conexiones ferroviarias a través de la línea Eurostar que cubre el trayecto Londres-Bruselas-Rotterdam-Amsterdam.

"A la espera de más detalles y de una mayor claridad sobre la situación en el Reino Unido el Instituto de Salud Pública ha recomendado al Gobierno limitar tanto como sea posible el riesgo de esta nueva cepa", señaló el Ejecutivo de Rutte.

Llamamiento de la OMS

La Organización Mundial de la Salud (OMS) hizo un llamamiento a a sus miembros en Europa para "reforzar sus controles" frente a la nueva cepa. "Hay medidas que pueden reducir la propagación. Necesitamos saber cuál es el riesgo", señaló.

Maria Van Kerkhove, epidemióloga de la OMS, explicó en declaraciones a la BBC que en la organización han estado en estrecho contacto con las autoridades británicas intercambiando información. "Hay varios estudios en marcha", sobre la nueva cepa. "Necesitamos comprender qué hace esta variante y cuáles son las implicaciones". También confirmó que se habían encontrado casos de la variante en Holanda, Dinamarca y en Australia. Según el Centro Europeo para el Control y Prevención de Enfermedades (ECDC), se habría detectado la nueva cepa también en Bélgica. Y el Ministerio de Sanidad italiano informó este domingo que han detectado en Roma el caso de una persona contagiada con la nueva cepa.

La rápida propagación es la principal característica de la nueva cepa de coronavirus detectada por primera vez en dos muestras tomadas en septiembre en Kent y Londres. Las nuevas variantes son algo frecuente desde que comenzó la pandemia, pero en noviembre empezó a haber pruebas de que esta se trasmitía mucho más rápidamente que el virus original. Esta característica empezó a preocupar a los científicos, que ahora consideran que esta mutación puede ser un 70% más contagiosa.

La nueva variante coronavirus tiene 23 cambios genéticos, algunos de ellos centrados en una proteína fuera del propio virus que puede facilitar el acceso a las células en el cuerpo humano. Los científicos repiten que no hay pruebas por el momento de que la nueva cepa agrave la enfermedad o aumente la mortalidad, pero las investigaciones prosiguen en estos momentos en los hospitales para confirmar este extremo. Tampoco hay pruebas por el momento de que esta variante haga la vacuna menos eficiente.