La Lomloe, conocida como ley Celaá, entrará en vigor en 20 días tras su publicación este miércoles en el BOE, aunque fija un calendario de implantación de las distintas medidas, algunas de ellas el próximo curso.

Con la Ley Orgánica de Modificación de la Ley Orgánica de Educación, que deroga la ley Wert, el castellano deja de figurar como lengua vehicular de la enseñanza y como lengua oficial del Estado, la religión es de oferta obligatoria, impulsa la FP, fomenta la educación para la salud desde Primaria y establece el incremento progresivo de puestos escolares en la red pública.

En diez años los centros ordinarios deberán tener recursos para atender alumnado con discapacidad y mientras tanto las administraciones prestarán apoyo a los centros de Educación Especial, aumenta las plazas públicas de Infantil de 0-3 años y promueve la existencia de centros públicos que incorporen Infantil con otras etapas educativas.

Según el calendario de implantación que publica el BOE, a la entrada en vigor de esta Ley se aplicarán las modificaciones relativas a la participación y competencias de Consejo Escolar, director o directora, autonomía de los centros docentes y a la admisión de alumnos, aunque los procesos iniciados sobre los dos últimos aspectos se regirán por la ley vigente en el momento de comenzarlos.

Al inicio del próximo curso se implantarán: los cambios en la evaluación y promoción de las diferentes etapas educativas, en las condiciones de titulación de educación secundaria obligatoria, ciclos formativos de grado básico y bachillerato y las condiciones de acceso a las diferentes enseñanzas.

La octava ley educativa de la democracia española modifica la Ley Orgánica 8/1985 del Derecho a la Educación y establece, entre otros, el derecho de los padres o tutores, en relación con la educación de sus hijos o pupilo, a escoger centro docente tanto público como distinto de los creados por los poderes públicos y a que reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones.