Decenas de concentraciones se han desarrollado este sábado en ciudades españolas, en la quinta jornada de protestas desde la detención del rapero catalán Pablo Hasél, con los principales altercados en Cataluña, donde han sido detenidas nueve personas, se han saqueado tiendas y ha ardido una fogata junto a la Bolsa.

Los Mossos d'Esquadra han detenido a 38 personas en Cataluña en relación con los desórdenes públicos y actos de pillaje.

    En un mensaje en las redes sociales, la policía catalana ha informado este domingo de que el grueso de los detenidos se ha producido en Barcelona, con 35 personas, 13 de ellos menores de edad, otro en Lleida, y dos más en Tarragona, estos tres últimos también menores.

Unas 6.000 personas, según la Guardia Urbana, confluyeron sobre las 19:00 horas en la plaza barcelonesa de Universitat, donde los agentes de policía habían cortado algunas calles próximas y retirado los contenedores de basura ante la convocatoria de la Plataforma Libertad Pablo Hasél, a la que se sumaron grupos de la izquierda independentista.

Luego, algunos encapuchados se han desplazado al Paseo de Gracia y han destrozado los escaparates de algunas tiendas y se han llevado material de los comercios.

Otras personas han prendido fuego justo delante de la entrada del edificio de la Bolsa de Barcelona, aunque las llamas no han afectado al interior del inmueble y han sido apagadas poco después por los Bomberos.

Además, otros encapuchados han lanzado piedras de un contenedor de obras contra los cristales del edificio modernista del Palau de la Música, rompiendo "cristales y vidrieras históricas".

También se han enfrentado con agentes de los Mossos, lanzándoles objetos, y han tirado motocicletas aparcadas por el suelo.

Otra ciudad en la que ha habido cargas policiales ha sido Pamplona, tras una manifestación de unas 800 personas convocada por Gazte Koordinadora Sozialista.

La Policía Nacional ha informado a EFE de que tras el lanzamiento de objetos a los agentes han tenido que intervenir los antidisturbios, al tiempo que han sido quemados varios contenedores de basuras.

También en Granada las protestas han incluido la quema de contenedores, y se ha producido una detención, en una manifestación en el centro de la ciudad andaluza convocada tanto para pedir libertad de expresión tras la detención de Hasél como en contra de la impunidad policial por la agresión de dos agentes a un hombre y su hija el pasado fin de semana en Linares.

No ha habido incidentes en la concentración el centro de Madrid, en medio de un dispositivo policial destinado a impedir que se repitieran los disturbios del miércoles pasado, que se saldaron con 19 personas detenidas y 55 heridas, 35 de ellas policías.

Un cordón policial separaba la plaza de Callao de la Gran Vía, donde aguardaban una veintena de furgones policiales y al menos 300 agentes, mientras los manifestantes coreaban cánticos como "Estado fascista, estado terrorista" o "Podemos y PP, la misma mierda es".

Sin embargo, cinco jóvenes fueron detenidos por intentar quemar un contenedor en la calle Trujillos cuando ya había concluido el dispositivo policial encargado de impedir desórdenes en la manifestación.

Fuentes policiales informaron a EFE de que los cinco jóvenes fueron detenidos por agentes de la comisaría de Centro que se encontraban en la periferia del dispositivo.

Ha habido además concentraciones de protesta en decenas de capitales españolas ante las delegaciones del Gobierno, como en Santander, con más de 150 participantes, y en Reus, Tarragona, Lérida, Sabadell y Palma, entre otras.

En la capital mallorquina la manifestación convocada había sido prohibida por la Delegación del Gobierno debido a la situación de pandemia, pero más de un centenar de personas han acudido a la protesta alternativa convocada por Arran.

Una 300 personas se han concentrado esta tarde en la localidad gerundense de Celrà, en apoyo al alcalde del municipio y diputado electo por la CUP, Dani Cornellà, quien resultó herido el viernes por la noche en los disturbios registrados en Gerona.

Cornellà explicó que recibió un golpe en la pierna y en la cabeza cuando intermediaba junto a la abogada Montserrat Vinyet ante mossos d'esquadra de paisano en el momento de una detención.