El hombre del que más se ha hablado en los últimos días, al señalarse su desplazamiento a España por razones humanitarias como el motivo de la crisis diplomática que se vive con Marruecos, tendrá este martes una oportunidad para explicarse. El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz tomará declaración al líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, en relación con las dos querellas presentadas desde hace años en su contra ante la justicia española.

El magistrado, que hasta ahora ha rehusado imponerle medida cautelar alguna, le interrogará por videoconferencia, puesto que Ghali sigue ingresado en el hospital de Logroño, al que fue trasladado en un avión medicalizado desde Argelia con identidad falsa. Su ingreso obedece a un cáncer que padece desde hace años, al que se ha sumado el covid, que le ha afectado seriamente los pulmones, lo que determinó su llegada a España, pese a que en la Audiencia Nacional había un par de querellas contra él por delitos de genocidio, lesa humanidad y torturas, entre otros.

Un activista y una asociación

El titular del Juzgado Central de Instrucción número 5 comenzará a interrogarle en primer lugar en relación con la querella que interpuso contra él el activista saharaui con nacionalidad española Fabel Breica por delitos de detención ilegal, torturas y lesa humanidad. Breica asegura cuando llegó a los campamentos de Tinduf en abril de 2019 fue amenazado por miembros del Frente Polisario para que los abandonara bajo la acusación de traidor, y acabó siendo detenido en un centro no identificado, donde se le sometió a torturas.

A continuación, se le preguntará por una querella anterior que durante años había sorteado, la de la Asociación Saharaui para la Defensa de los Derechos Humanos (Asadeh) por genocidio en concurso con delitos de asesinato, lesiones, detención ilegal, terrorismo, torturas y desapariciones. Esta denuncia dio lugar a la apertura de las diligencias previas abiertas en su contra ya en 2008. Incluso se le había citado en un par de ocasiones a declarar aprovechando que se le situaba en España, la última vez, en 2016 con motivo de una conferencia que iba a dar en Barcelona.

Al haber sido imposible que compareciera entonces, ambos querellantes temieron que no acudiera a la citación prevista por Pedraz, por lo que instaron la imposición de medidas cautelares, incluida la prisión, que previsiblemente reiterarán este martes tras escuchar las explicaciones que aporte Ghali. El magistrado pospuso al término de las declaraciones la celebración de una vistilla del 505 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, imprescindible para imponer este tipo de medidas.