La irrupción de la variante ómicron, la más contagiosa hasta la fecha y la dominante ahora mismo (supone entre el 70% y el 80% de los casos), ha disparado los contagios, marcando cada día un nuevo récord. Sin embargo, la sexta ola parece estar rozando su fin. Al menos, su pico. Después de once semanas seguidas en aumento, es la primera vez que la incidencia acumulada empieza a retroceder tímidamente. Sucedió este martes y ha vuelto a suceder hoy, cuando se han registrado 3.286 casos por 100.000 habitantes. Con toda la precaución, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, ha explicado esta tarde que los datos demuestran que "cabe esperar una consolidación de la bajada, lo cual demostraría que hemos alcanzado el pico o estamos muy cerca".

Según la última actualización de datos del martes, la transmisión por covid bajó 91 puntos, hasta los 3.306 casos, con un descenso en el número de contagios desde el lunes (94.472 nuevos positivos). Estos datos podrían confirmar que la sexta ola, que ha dejado casi 3 millones de contagios en solo mes y medio, debido a la variante ómicron, habría tocado techo. No obstante, hay que esperar porque algunas comunidades, como Murcia y Castilla La Mancha, no han notificado nuevos contagios en las últimas horas.

La incidencia, en todo caso, sigue siendo altísima, especialmente si se compara con la registrada el año pasado: siete veces superior. Sin embargo, y gracias al avance de la vacunación, las probabilidades de ingresar en una uci son entre 10 y 15 menos que en 2021 y hay 20 veces menos probabilidades de fallecer tras contagiarse de coronavirus. La ocupación hospitalaria actual, según los datos de Sanidad, es del 15%. El porcentaje llega al 23% en el caso de los camas en cuidados intensivos frente al 28% del año pasado.

Tras su encuentro semanal con las comunidades autónomas, Darias ha insistido en la importancia de la vacunación. Entre los mayores de 12 años, más del 90% ya tienen la pauta completa. Los sueros pediátricos -la campaña comenzó a mitad de diciembre- alcanza ya al 46% de los niños y las niñas de entre 5 a 11 años, que ya tienen su primer pinchazo (para el segundo hay que esperar ocho semanas). Mientras, el 88% de los mayores de 60 años ya han sido inoculados con la dosis de refuerzo, que, en el caso de los que han pasado la enfermedad, se debe poner a las cuatro semanas de haberse infectado.

La dosis de refuerzo (la tercera) es fundamental para ganar la guerra al coronavirus, ha insistido Darias. Un estudio del Instituto de Salud Carlos III demuestra que, en la población mayor de 65 años, ese pinchazo incrementa los anticuerpos totales hasta 20 veces. Realizado entre 1.200 personas, el informe corrobora la eficacia de la inmunidad celular, ha explicado el responsable de la institución, Cristóbal Belda. "Los primeros resultados demuestran la eficacia de la tercera dosis frente a ómicron y delta", ha comentado.

En el último Consejo Interterritorial, el Ministerio de Sanidad se mostró decidido a dar pasos hacia un cambio en el sistema de contabilidad y análisis del covid en un afán de "gripalizar" el coronavirus por entender que la pandemia entraba en un "nuevo estado" y había que adaptar los recursos. Sin embargo, Darias no ha mencionado este objetivo. Tampoco ha hablado de la futurible cuarta dosis de la vacuna ni de la posibilidad de levantar alguna media anticovid. "Vamos a detenernos en el momento actual", ha concluido.