El ministro español de Exteriores, José Manuel Albares, y su homólogo marroquí, Naser Burita, han acordado este miércoles la reapertura de las fronteras de Ceuta y Melilla, cerradas desde hace dos años. "Hemos llegado a un acuerdo para abrir las fronteras en los próximos días, la fecha exacta la va a comunicar el Ministerio de Interior", ha manifestado Albares. "Queremos que la reapertura sea de forma ordenada y gradual y que desaparezca el comercio atípico", ha añadido.

Ambos ministros de exteriores han escenificado en la ciudad marroquí de Marrakech la buena sintonía entre países, según han defendido en los dos encuentros que han mantenido. Han apuntado que se ha avanzado en la "hoja de ruta" que hace un mes pactaron el presidente español, Pedro Sánchez, y el monarca marroquí, Mohamed VI. Además, el ministro español ha defendido que se ha reducido la llegada de migrantes a España desde el reencuentro diplomático. 

El cara a cara entre ministros se ha producido en pleno escándalo por los casos de espionaje con el sistema Pegasus a representantes del Gobierno español. "Las relaciones internacionales se basan en hechos, no voy a entrar en ninguna conjetura ni hipótesis sobre ningún país del mundo", ha defendido Albares sobre la posibilidad que Marruecos disponga y utilice el sistema Pegasus. Ante la insistencia de los periodistas, Albares no ha querido aportar más detalles sobre si ha abordado este tema en los encuentros que ha mantenido con Burita.

Según el medio británico The Guardian, Marruecos tendría 200 teléfonos españoles entre sus posibles objetivos a espiar con este programa israelí. El Gobierno marroquí no se ha manifestado sobre estas últimas filtraciones y su versión oficial es que ni ha comprado y, por tanto, no ha empleado, Pegasus. Así lo defendió hace un año, cuando varios medios internacionales señalaron al país norteafricano como uno de los usuarios de esta herramienta de espionaje para intervenir teléfonos de dirigentes, activistas y periodistas.

Apoyo al plan para el Sáhara

Burita y Albares también aprovecharon la oportunidad para reiterar el apoyo del gobierno español al plan de autonomía marroquí para el Sáhara Occidental. Este movimiento de Moncloa, que calificó esta propuesta como "la base más seria, creíble y realista", supuso el desbloqueo de las relaciones entre ambos países. Los lazos entre ambos lados del estrecho se habían deteriorado desde el ingreso a un hospital riojano del líder del Frente Polisario y la entrada en Ceuta de más de 10.000 personas con la permisividad de las autoridades marroquís hace un año.

El encuentro se ha producido durante la cumbre de países aliados contra el Daesh celebrada en la ciudad marroquí. Este encuentro, capitaneado por Estados Unidos y Marruecos, ha reunido una setentena de países y organismos mundiales con el objetivo de analizar el avance del autodenominado Estado Islámico en África, Irak, Siria y Afganistán.

El Sahel se ha convertido, en estos últimos años, uno de los puntos del planeta en que el terrorismo y en concreto Daesh han logrado sus mayores avances. El Sahel se ha convertido en el "epicentro del terrorismo yihadista", ha defendido el ministro español de Exteriores, una de las opiniones más repetidas por los representantes. Según la delegación estadounidense, el terrorismo en esta región, especialmente en la triple frontera entre Malí, Burkina Faso y Níger, aumentó más de un 40% entre el 2018 y 2021.