La primera reunión telemática mantenida entre los interlocutores nombrados por los vocales conservadores y progresistas del Consejo General del Poder Judicial les ha permitido avanzar en las bases para proceder a los nombramientos. Pero despacio. Tan despacio que no volverán a reunirse hasta el próximo miércoles, día en que tendrán encima de la mesa los nueve nombres de candidatos que proponga el sector cuyos miembros fueron elegidos a propuesta del PSOE.

Fuentes del órgano de gobierno de los jueces señalaron que El Periódico de España que cada grupo de interlocutores hará su propio comunicado sobre los acuerdos alcanzados, que de momento pasan porque los candidatos procederán preferentemente del Tribunal Supremo y "los nombramientos, conforme a la pauta seguida por este CGPJ, han de realizarse por una amplia mayoría" y que "la selección de los candidatos a tan alta magistratura ha de llevarse a cabo tras una minuciosa evaluación de sus currículos".

El comunicado de los interlocutores conservadores, que conforman José Antonio Ballestero y Carmen Llombart, incluye otros tres: "que se ha de considerar la repercusión de los seleccionados en la composición de los órganos jurisdiccionales de procedencia; que no es conveniente, por tanto, llevar al pleno los nombramientos en tanto tal consenso no se haya logrado y que el consenso se alcanzará tras la deliberación en el seno de los respectivos grupos".

En estos tres puntos no ha habido acuerdo con los representantes de la otra sensibilidad: Roser Bach, Rafael Mozo y Álvaro Cuesta, según las fuentes consultadas. Estos últimos se han comprometido en remitir a sus compañeros un listado de nueve nombres de candidatos con sus correspondientes currículos.