ERE Andalucía

Anticorrupción pide suspender la entrada en prisión de Griñán en espera de nuevos informes médicos

Consideran que debe estarse a lo que diga la forense tras realizarse nuevas pruebas médicas, teniendo en cuenta que el tratamiento para el cáncer de próstata que sufre aún no se ha iniciado

José Antonio Griñán.

José Antonio Griñán. / EFE

Cristina Gallardo / Isabel Morillo

La Fiscalía Anticorrupción cree que son necesarios informes médicos más precisos en relación con el cáncer de próstata que sufre el expresidente de la Junta de Andalucía José Antonio Griñán, por lo que de momento insta la suspensión de su ingreso en prisión para cumplir la pena de seis años de cárcel que se le impuso por el caso de los ERE.

La posición del Ministerio Público responde al informe emitido por el Instituto de Medicina Legal de Sevilla el pasado 3 de enero, y tiene en cuenta además la cercanía del diagnóstico realizado a Griñán y el hecho de que el tratamiento médico aún no se ha iniciado.

El escrito, que firman los fiscales Juan Enrique Egocheaga y Manuel Fernández Guerra, ha sido presentado ante la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Sevilla, que es la que juzgó el caso y condenó a Griñán por los delitos de prevaricación y malversación, por lo que también le corresponde la ejecución de la sentencia y la decisión sobre el ingreso en prisión del exdirigente socialista andaluz.

Beneficio de la suspensión

Tras valorar el informe médico, que ha sido elaborado después de que el forense judicial reconociera a Griñán, los fiscales instan la aplicación "del beneficio de la suspensión" de su ingreso en un centro penitenciario prevista en el propio Código Penal. En su artículo 80.4 la norma prevé que los jueces y tribunales puedan otorgar la suspensión de cualquier pena impuesta "sin sujeción a requisito alguno en el caso de que el penado esté aquejado de una enfermedad muy grave con padecimientos incurables”.

Según la médico forense, es necesario hacer un “análisis predictivo” de la evolución de la enfermedad, por lo que no sería conveniente el ingreso del el expresidente andaluz en un centro penitenciario "hasta tanto se confirme la remisión, en su caso, de su Patología Oncológica por los Servicios de Urología y de Oncología Radioterápica”".

Por ello, los fiscales Anticorrupción consideran que deben realizarse dichas pruebas que permitirán a la forense evacuar "un informe más preciso sobre la procedencia de su ingreso en prisión, que deberá suspenderse entretanto". Una vez hable la forense, consideran que, además, sería necesaria una nueva valoración de los servicios penitenciarios de la cárcel de Sevilla, que es el que está previsto para el cumplimiento de la pena impuesta.

Mientras otros condenados ya han ido entrando en prisión durante los últimos días, la ejecución de la condena con respecto de Griñán se vio paralizada tras conocerse que sufre una enfermedad grave cuyo tratamiento no podría efectuarse en un centro penitenciario.

Postura de Moreno

El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, aseguró este miércoles que “personalmente no puede ser partidario” de que el exjefe del Ejecutivo andaluz entre en la cárcel para cumplir su condena por malversación en el caso ERE, en línea del informe emitido por la médico forense a la que pidió un informe la Audiencia.

Hasta ahora todos los escritos del PP como acusación particular se han plegado a la línea marcada por la Fiscalía Anticorrupción, que en todos los casos se ha negado a aplazamientos para la entrada en prisión. Fuentes populares había indicado que su letrado actuaría en consonancia por el Ministerio Público.

"Aquí tenemos dos percepciones distintas. Por un lado la judicial, que es inapelable. Estamos ante el caso de corrupción más grave de la historia de España y donde todavía quedan cien juicios pendientes", aseguró el presidente andaluz, que recordó que hay dos sentencias firmes, de la Audiencia y ratificada por el Supremo. “Hay una responsabilidad por parte de anteriores gobiernos que es inapelable e incontestable" y "no se deben discutir las decisiones que han tomado de manera clara y contundente nada más y nada menos que 16 jueces”, señaló.

Sin embargo, Moreno diferenció el plano judicial del “ámbito personal” y reconoció que tiene “especial sensibilidad” en este caso porque su padre falleció de cáncer con una edad muy parecida a la que ahora tiene Griñán. "Yo personalmente no puedo ser partidario de que el señor Griñán una vez que se ha certificado que tiene cáncer entre en la cárcel. Una persona que está enferma de manera grave tiene que ser tratada convenientemente. Y si el médico forense dice que solo se puede tratar convenientemente sin entrar en prisión, entonces que no entre en prisión", zanjó Moreno, que recordó que, aunque los avances sanitarios han permitido "cronificar en muchos casos" el cáncer sigue siendo una "enfermedad durísima”.