Precampaña electoral

Proyecto Drago entra en competición con Podemos para aglutinar a la izquierda

Alberto Rodríguez advierte que la alianza con Verdes Equo es "un primer paso" para otros acuerdos | Más Canarias también se aleja de la confluencia de Podemos e IU

Alberto Rodríguez.

Alberto Rodríguez.

R.A.D.

El Proyecto Drago que lidera Alberto Rodríguez se lanza al espacio político de la izquierda canaria para buscar acuerdos que potencien su candidatura para las elecciones autonómicas del 28 de mayo. Y lo hace entrando en competencia directa con su antigua formación, Podemos, que lleva también varios meses tejiendo una confluencia electoral para concurrir a los comicios y de la que ya se han celebrado varias asambleas y reuniones.

El acuerdo electoral al que han llegado Proyecto Drago y Verdes Equo Canarias entra en la línea de flotación de la plataforma impulsada por Podemos e Izquierda Unida (IU). La formación ecologista estuvo hasta la semana pasada participando activamente en los debates de la confluencia, pero en pocos días y, tras mantener contactos con Alberto Rodríguez y los que le acompañan en su nueva aventura política, finalmente se desvinculó del proyecto de Podemos. Asimismo, la formación Más Canarias, vinculada al proyecto político de Íñigo Errejón, también se ha dado un tiempo para decidir cómo acudirá a las elecciones tras levantarse de la mesa de la confluencia. Su coordinador, Javier Navarro, critica que se estaban dando "pasos hacia atrás" en las negociaciones y culpa a Podemos del bloqueo. No hay que olvidar que Proyecto Drago ha entrado a formar parte de los Acuerdos del Turia con Más País, Compromís y Verdes Equo.

Los dirigentes de Podemos e IU habían acelerado los contactos antes de finalizar 2022 porque la intención era concretar la plataforma en los inicios de este año, con el fin de preparar el programa electoral y perfilar las listas. Sin embargo febrero se ha iniciado con esta primera división interna sin que se hayan concretado estas cuestiones y con Podemos en plena precampaña con sus lemas y logotipos sin otras fuerzas de izquierda en sus actos. Precisamente uno de los escollos de última hora ha sido el nombre de la plataforma, según reconoce uno de los portavoces de Verdes EquoFrancisco Vaquero, ya que se había acordado el nombre de Canarias Plural pero los dirigentes de Podemos quieren que el nombre de la formación aparezca para no diluir la marca en los comicios.

En las últimas reuniones también han habido problemas con las listas. "Con el planteamiento que estaba sobre la mesa nos quedábamos fuera", advierte Vaquero, que afirma que "cedimos hasta el último momento porque sabemos que somos una fuerza pequeña, pero los escollos ya no se podían salvar y no estábamos por la labor de seguir dilatando el proceso", añade.

Puertas abiertas

En sus redes sociales, Alberto Rodríguez se felicitaba por el acuerdo con Verdes Equo Canarias y lanza un aviso a navegantes dirigido hacia su antigua formación: "Es un primer paso y no será ni mucho menos el último de los acuerdos, las puertas están abiertas a la sociedad civil y a otras fuerzas". En otro tuit Proyecto Drago advierte que "pactar solo para mantener puestos, estatus o dinero es política conservadora de la peor escuela. Ningún sillón ni sueldo público vale más que la defensa de nuestro pueblo y nuestras islas", también en clara referencia a Podemos.

En el caso de que Más Canarias decida finalmente unirse a Proyecto Drago para concurrir a las elecciones autonómicas quedaría por cerrar la posición de Sí Se Puede, una formación con cierta notoriedad en Tenerife pero con escasa presencia en Gran Canaria. Entre sus cargos públicos más relevantes el diputado en el Parlamento Francisco Déniz y el concejal en La Laguna Rubens Ascanio. Esta formación ha participado activamente en las conversiones con Podemos e IU pero será la militancia la que decida finalmente qué posición adoptar ante los comicios.

Por parte de IU, su coordinadora regional, Luisa Tamayo, mantiene la "mano tendida" de la formación al resto de fuerzas de izquierda para confluir en un mismo espacio, no solo de cara a las elecciones sino también de cara al futuro con el fin de condicionar las políticas del Gobierno de turno. "La estrategia de cada partido es libre y respetamos la legitimidad de sus decisiones, aún hay tiempo para ampliar la confluencia y consolidar el trabajo que se ha hecho en los últimos meses", agrega.

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