El PSOE se aferra al éxito de la moción para "motivar" a sus votantes tras "la crudeza de los últimos meses"

Hasta los más adictos al trabajo agradecen de vez en cuando unos días de descanso. De este inusual asueto ha disfrutado el Gobierno con la celebración de la moción de censura de Vox, que este miércoles cosechó el rechazo del Congreso. Hasta a un Gabinete curtido durante la legislatura en una constante tensión entre PSOE y Unidas Podemos, exacerbada en los últimos meses por la reforma de la ley del 'solo sí es sí', estas horas de paz le han resultado reconfortantes. Lo han sido para los ministros pero también para el resto del partido.

Ha tenido un efectovo restaurador, tonificante para el Gobierno porque, señala un ministro, ofrece una imagen "ordenada" del Ejecutivo. "El Gobierno reforzado y el programa explicado", se añade como el mayor beneficio, tras el bucle negativo en el que estaban inmersos desde que en noviembre Pedro Sánchez decidió impulsar la eliminación de la sedición y los cambios en la malversación. Esto tuvo un efecto desestabilizador porque impidió a Moncloa poner en valor su gestión. Lo mismo ha sucedido con el goteo de rebajas de penas a delincuentes sexuales, la crisis posterior por la modificación de la ley y el estallido del 'caso Mediador', que afectó a un diputado socialista.

En todo este tiempo la sensación en los territorios era de hartazgo con todo el ruido que proyectaba la política nacional, a las puertas de las elecciones autonómicas y municipales del 28 de mayo. Ese pesar, con el éxito de la moción -el Gobierno se siente el gran ganador- , se ha disipado. Al menos de momento. "Ayuda a motivar al electorado del PSOE que se encontraba más desconectado por la crudeza de los últimos meses", aseguran un responsable de Organización. "Al menos lo que sale del Ejecutivo ya no es ruido y se puede hablar de gestión", señalan otras fuentes territoriales.

La moción de censura evidencia la entente entre Vox y el PP

"Sin duda refuerza el bloque, deja tocada a la derecha y ayuda a Yolanda (Díaz) en su pugna con Podemos", valoran en otra comunidad. Nadie se atreve a afirmar que contribuye a la movilización aunque este miércoles algún ministro sí lo defendía. "Es un chute para la izquierda porque demuestra lo que tenemos enfrente". En la dirección del partido son más cautos y limitan las consecuencias positivas a la imagen de Gobierno unido.

Sánchez y Díaz, más vitaminados

En Moncloa, a pesar de su satisfacción, tampoco echan las campanas al vuelo porque "los estados de ánimo duran lo que duran" pero sí creen que a sus presidentes autonómicos y sus alcaldes les viene "bien" que se pueda explicar la acción del Gobierno. "Se afianza el balance del Ejecutivo de coalición, fortalece la idea de lo que se ha hecho estos años".

Pese a que, a excepción del CIS, todas las encuestas dan por delante a Alberto Núñez Feijóo, en el PSOE se acogen al último sondeo del Centro de Investigaciones Sociológicas para mantener que el viento es favorable para ellos. No por la estimación de voto, que les colocaba cinco puntos por delante del PP, sino por los datos puros. Han logrado contener el trasvase de votantes socialistas que se marchan con los populares. Sánchez, destacan, logró en marzo el dato más alto de confianza desde abril de 2022 mientras que Feijóo ha visto reducido el porcentaje de ciudadanos que lo prefieren como presidente del Gobierno.

Con esto viento de cola, si dura, encaran el 28 de mayo. En Ferraz sostienen que el electorado de la derecha está tradicionalmente más movilizado y que el progresista lo hará conforme se acerquen las elecciones. Aunque esta no es una visión unánime en el partido. En algunos ámbitos no se niega cierto desencanto, por la sonora convivencia con Unidas Podemos o el apoyo parlamentario de ERC y EH Bildu.

Apoyo para evitar los recortes del PP

En el Gobierno se muestran también satisfechos del éxito de Yolanda Díaz, que intervino en la moción para lanzar su candidatura a la Presidencia, que el domingo 2 de abril anunciará de manera oficial en un acto en Madrid. "Ha supuesto un refuerzo importante porque ha defendido a la coalición y la ha puesto en valor", destacan fuentes gubernamentales. Para el PSOE todo esto pone más difícil a Podemos su aislamiento y, de hecho, el protagonismo de la vicepresidenta segunda se concibió para presionar al reducto 'morado.

Junto a la consolidación de la acción del Gobierno, en Moncloa están empezando a lanzar varias ideas que configuran ya su discurso electoral. Por supuesto, que Feijóo solo podrá ser presidente si suma con la ultraderecha. Y de manera previa, el propio Pedro Sánchez lo dijo en su intervención ante de la votación de la moción, que , de cara al 28-M "necesitan a Vox para poder gobernar". Pero también que volver a un Gobierno del PP sería regresar a los "recortes" de hace 10 años. Y, otra más, que resulta más novedosa: que "para revertir los destrozos sociales de hace una década el Ejecutivo progresista necesita una legislatura más". A nueve meses de las generales, la campaña electoral no ha hecho más que empezar.