ACUERDO EN LA IZQUIERDA

Podemos arrastra a Sumar a una nueva batalla interna hasta las puertas del 23J

La entrada de los morados en la coalición abre una nueva fase de desconfianza a la izquierda del PSOE

Ione Belarra, secretaria general de Podemos.

Ione Belarra, secretaria general de Podemos. / EP

Ana Cabanillas

Y el acuerdo llegó a la izquierda como el preludio de una nueva batalla. Podemos anunció este viernes un acuerdo con Sumar a regañadientes, entre reproches a Yolanda Díaz, denuncias de veto a Irene Monteroy críticas a una oferta ‘injusta’. Esa propuesta, tan criticada por Ione Belarra a mediodía, fue horas después firmada y registrada, en un paso obligado ante el riesgo de descalabro electoral y orgánico de los morados. Y si los tambores de guerra han marcado los primeros compases de esta alianza, se espera que continúen en las próximas semanas, arrastrando a Sumar a una nueva pugna interna hasta las puertas de la campaña electoral del 23 de julio. 

La coalición, integrada por 16 partidos, entra ahora en una nueva fase donde Podemos volverá a ser protagonista. Los morados prevén alargar la batalla hasta el próximo 19 de julio, cuando expira el plazo para registrar las listas electorales. Hasta entonces, avanzan desde el partido, seguirán presionando para incluir a Irene Montero en la lista de Madrid, después de que fuese “vetada” por la propia Díaz, según recriminó Belarra. Podemos no da la batalla por perdida y tensará la cuerda hasta el final, alargando el enfrentamiento público a poco más de un mes antes de la cita con las urnas.

Gestionar la desconfianza

La unidad se ha alumbrado en un clima de desconfianza difícil de revertir. Un escenario que se hará aún más patente en los próximos días, cuando la cúpula de Podemos y su plataforma mediática, Canal Red, alienten la ofensiva contra Yolanda Díaz por no admitir a Montero en la lista de Madrid. La segunda, porque las guerras que se han librado en los últimos días han dejado heridas abiertas.

Irene Montero, ministra de Igualdad de Podemos.

Irene Montero, ministra de Igualdad de Podemos. / EFE

El proceso de la negociación ha dejado damnificados y ofendidos, después múltiples episodios de enfrentamientos; desde Pablo Iglesias alzándose como portavoz del partido para criticar a los aliados de Yolanda Díaz; los comuns acusando a Podemos de negociar en paralelo una coalición con ERC; con un partido fantasma registrado "por error" por un dirigente de Podemos o la amenaza de los morados, a 24 horas del pacto, de presentarse en solitario por Comunidad Valenciana si no se les daba más protagonismo. Una serie de giros de guion que han soliviantado a gran parte de los aliados de Yolanda Díaz con quienes están condenados a convivir durante los próximos cuatro años.

La gestión del nuevo escenario es todo un reto para los partidos que conforman Sumar y sobre todo para Yolanda Díaz, que tendrá que buscar aliados dentro de su propio espacio para hacerse fuerte en la próxima legislatura donde, se da por descontado, Podemos mantendrá un pulso permanente. Los contrapesos y los límites que establezca Sumar marcará en buena medida el impacto real que tengan los morados en el ambiente del futuro grupo parlamentario.

El veto

El acuerdo ha sido una meta a la que todos han llegado malheridos. Las últimas horas de negociaciones se fueron al límite y tuvieron momentos de alta tensión. Las continuas denuncias de veto a Irene Montero han trufado los mensajes de sus dirigentes estos días, pero este viernes fue la propia Belarra quien lanzó esta acusación directa a Díaz, antes de avanzar que aceptaría el acuerdo. El resultado de Podemos es que tiene el puesto número 5 de la lista por Madrid, que será ocupado por la propia Belarra. Los nombres de la lista en la capital fueron pactados con Sumar, que según fuentes negociadoras, expuso el rechazo que generaba Irene Montero en el resto de integrantes de la lista, en referencia a Más Madrid.

El partido de Mónica García, que durante toda la campaña del 28M sufrió los ataques directos de la cúpula morada, que les llegó a tildar de "izquierda cuqui" y a equipararlos con el PSOE, estaba disconforme con compartir lista con la ministra de Igualdad. La figura de Montero hacía volar por los aires la estrategia pactada con el partido madrileño, que dirigirá la campaña junto a Díaz para plantearla "en positivo", frente al tono más agresivo y de confrontación por el que se caracteriza la ministra de Igualdad. El varapalo del Tribunal Supremo a la dirigente morada esta misma semana fue la última puntilla para que el equipo de Yolanda Díaz frenara su presencia en las listas de Madrid.

Otras vías para Montero

La posibilidad de que Irene Montero concurra al 23J está abierta, aunque tendría que hacerlo por otra circunscripción distinta a Madrid, o en el puesto número 9 de la capital, donde no resultaría elegida. Opciones que no estarían sobre la mesa para la ministra de Igualdad, que aspiraría a entrar por Madrid, como en las anteriores elecciones.

La cúpula del partido se blindó con una consulta exprés a las bases donde lograron el aval del 92,9% para tomar cualquier decisión. La dirección de Podemos se reunió y acordó por unanimidad aceptar el acuerdo propuesto, aunque implicase dejar fuera de Madrid a Irene Montero. La propia Irene Montero aceptó los términos del acuerdo.

"Nos piden una vez más que sacrifiquemos a nuestro mayor activo político", declaró Belarra en una comparecencia sin preguntas desde la sede. Equiparaba así a Díaz con Pedro Sánchez cuando en 2019 rechazó la presencia de Pablo Iglesias en el Gobierno. Una muestra más de la línea discursiva que continuará en los próximos días.

Sin Echenique, Pam, o Rosell

Además de Irene Montero, el acuerdo alcanzado deja fuera a figuras relevantes de Podemos como su portavoz parlamentario Pablo Echeniquetal como adelantó este medio; tampoco entraría la secretaria de Estado de Igualdad, Ángela Rodríguez Pam; la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell;

Ángela Rodríguez 'Pam', secretaria de Estado de Igualdad.

Ángela Rodríguez 'Pam', secretaria de Estado de Igualdad. / EFE

Con este pacto, Podemos obtiene el quinto puesto en las listas por Madrid que ocupará Ione Belarra, y que convivirá con Iñigo Errejón (puesto 4) y Tesh Sidi (3) en la cuota de Más Madrid, que también tiene los puestos 7 y 10. Mientras, los afines a Yolanda Díaz tendrán el 2 y el 6. El partido morado también obtiene el cuarto por Barcelona, donde estará Lilith Verstrynge, secretaria de Organización del partido; y encabeza trece candidaturas, con los números uno por Ávila, Araba (Roberto Uriarte), Badajoz, Cáceres, Granada (Martina Velarde), Guadalajara, Gipuzkoa (Pilar Garrido), Las Palmas (Noemí Santana), Murcia (Javier Sánchez Serna), Navarra (Idoia Villanueva), Palencia, Segovia y Teruel.

Desde Sumar defienden que tendrían asegurados hasta 8 diputados con este reparto, aunque Belarra denunciaba este viernes que con esta propuesta, "Podemos no tiene asegurada su presencia en el Congreso de los Diputados".