Foro La Toja

Rajoy sitúa el nacionalismo como enemigo de la democracia y admite que la amnistía le pone "muy nervioso"

El expresidente del Gobierno subraya que "los desafíos son múltiples y las prioridades también" y considera como el primero de ellos, la "prioridad máxima", "preservar la democracia liberal"

El expresidente del Gobierno Mariano Rajoy.

El expresidente del Gobierno Mariano Rajoy. / EP

EFE

El expresidente del Gobierno Mariano Rajoy ha situado el nacionalismo como uno de los enemigos de la democracia y ha confesado que la amnistía es una cuestión que le "pone muy nervioso".

Rajoy ha participado por quinta vez en el Foro La Toja-Vínculo Atlántico, esta vez en el marco del "Diálogo Presidentes: La gobernanza en las sociedades modernas", en el que le ha acompañado el expresidente de Chile Sebastián Piñera y que ha moderado Trinidad Jiménez, exministra de Asuntos Exteriores y de Cooperación.

En ese encuentro ha destacado que "los desafíos son múltiples y las prioridades también" y ha considerado como el primero de ellos, la "prioridad máxima", "preservar la democracia liberal".

"La democracia es el mejor sistema político para ordenar la convivencia, se basa en valores superiores. Es sinónimo de progreso, de bienestar social", ha indicado.

Como "principales enemigos" ha situado a China y su "régimen autoritario"; Rusia, que "se ha convertido en actor bastante incómodo", y "los nacionalismos y los populismos".

"Son democracias formales en muchos casos, pero en otros casos toman decisiones y hacen propuestas bastante poco democráticas", ha advertido.

"Malas compañías"

Rajoy ha avisado del cuidado que hay que tener al "andar con malas compañías, que suelen ser peligrosas y llevan a tomar decisiones impropias en las democracias liberales".

"No me voy a referir a ninguna", ha comenzado diciendo, pero después ha aludido a "una" decisión que le "pone muy nervioso y no se ha tomado, la famosa amnistía".

"No sé si se va a aprobar o no. Desconozco las intenciones de quién pueda hacerlo (aprobarla). La amnistía es una enmienda a la totalidad de algunos de los aspectos más importantes que van unidos a la democracia liberal, en concreto, a la libertad y la igualdad de derechos", ha dicho.

El expresidente ha considerado que "es urgente reforzar las democracias liberales" y ha abogado por "desterrar" de la democracia "la mentira, la mediocridad y el insulto".

En ese sentido, ha mencionado que "el debate de investidura del martes" en España "no es precisamente el que contribuya a la credibilidad de la clase política".

También ha pedido "contención y consenso", porque "hay quien se cree que por ganar las elecciones puede hacer lo que le dé la gana y no es verdad".

Contención en las decisiones y "verbal", como cuando se dice "hay que cargarse a los ricos", a lo que él responde que "no", que lo que hay que hacer es "cargarse a los pobres", en el sentido de hacer a estos que sean "ricos".