Un espectáculo de marionetas poéticas, que nos sumerge en una escena de otro tiempo, otro lugar, inmerso en una atmósfera misteriosa.

Un artista intrépido, que vive entre el mundo de los sueños y la realidad, realiza su espectáculo sin darse cuenta de la presencia de otro personaje, tanto inquietante como amigable, cercano y oscuro como una sombra. Un cabaret marcado por ritmos de trapo, con la emoción creada por el equilibrista en su cable.

Gildo, el incansable showman, siempre encuentra un lugar para exhibir su arte. En teatros, cabarets, en la calle, porque para él el público es lo que hace el teatro.