El director del Festival de Sitges, Ángel Sala, ha pedido hoy disculpas al público que se sintió ofendido ayer en la proyección de "Bocadillo", un filme inexistente que se había anunciado como el primero del youtuber Wismichu y en realidad era un vídeo de tres minutos repitiéndose en bucle.

Parte del público que acudió a la sala Retiro de Sitges (Barcelona) ha pedido que se le devuelva el dinero tras comprobar que el supuesto largometraje consiste en una única escena en la que un grupo de jóvenes piden bocadillos en un bar.

Ismael Prego, mas conocido como Wismichu, ha aclarado posteriormente a través de las redes sociales, que su intención era grabar la reacción del público en la sala de cine para elaborar un futuro audiovisual.

La 'performance' del youtuber en Sitges ha levantado mucha polémica en la red y algunos internautas han insultado a miembros de la organización del festival por dar espacio en una sala de cine a una proyecto tan alejado de lo cinematográfico.

Ángel Sala ha explicado que "el festival ha querido abrir un puente con los youtubers y ser receptivo con las nuevas ideas", por lo que han permitido la proyección de Wismichu, igual que lo hizo días atrás con El Rubius.

"Sé que hay gente a la que no le gustó y me disculpo con los que se hayan sentido ofendidos -ha dicho Sala-, pero también quiero denunciar la actitud de ciertos voceros impresentables que han insultado a miembros de mi equipo, que son profesionales impecables".

"En las redes hay gente opinando con mucho talento, pero también hay otros que sólo buscan extender el odio y destruir. Nosotros queremos apoyar a las nuevas formas de opinar a través de internet, pero sólo si se hace desde el respeto. No convirtamos esto en un 'Assessination Nation'", ha concluido el director.