Las roscas, donas o donuts, son una de las recetas dulces más consumidas en todo el mundo. Su textura esponjosa y el glaseado que las recubre hace las delicias de quienes los degustan. Si quieres disfrutar de unas roscas más sanas que las elaboradas por las grandes marcas, apunta esta receta de donuts para elaborarlos en tu cocina y sorprender a todos:
Ingredientes para hacer donas caseras
- 140 gr. de harina de fuerza
- 90 ml. de agua tibia
- 3 gr. de levadura fresca
- 30 ml. de leche a temperatura ambiente
- 30 gr. de azúcar
- 4 huevos
- 30 gr. de mantequilla
- 5. gr de sal
- Aceite de freír
- 150 grs. de azúcar glas
¿Cómo hacer donas caseras?
El primer paso para empezar a preparar lo que serán nuestras roscas caseras será elaborar la masa madre. Para ello hay que disolver la levadura en agua tibia y añadirle posteriormente la harina de fuerza. Cuando tengas esta masa preparada, deberás dejarla reposar durante una hora en un recipiente tapado a temperatura ambiente.
Mientras esperamos a que suba la masa madre, podemos comenzar a preparar la masa de las roscas. En primer lugar, habrá que disolver la levadura en la leche e ir añadiendo la harina. En ese punto, deberás añadir la masa madre y las yemas de los huevos poco a poco. Finalmente, deberás incorporar el azúcar y un poco de sal.
Para el amasado puedes optar por hacerlo manualmente o recurrir a un robot de cocina. Por último, incorpora la mantequilla a temperatura ambiente. Mientras amasas el objetivo será conseguir una masa elástica y que no se pegue.
Esta masa también deberás dejarla reposar durante una hora, tapada a temperatura ambiente. Pasado ese tiempo comenzaremos el trabajado con el rodillo para extender la masa y poder darle forma a las roscas. Para facilitar este paso existen moldes específicos para roscas.
Aprovechando ese tiempo puedes ponerte con el glaseado. Simplemente tendrás que mezclar el azúcar glas con agua, hasta conseguir una mezcla cremosa.
El último paso será freír tus roscas en una sartén con aceite abundante, de tal manera que queden flotando.
Cuando tengas tus roscas fritas, ya solo te quedará glasearlos por ambos lados y estarán listos para hacer las delicias de tus comensales.
