Los electrodomésticos son una ayuda fundamental en la cocina. No obstante, hay funciones de los mismos que esconden valiosos trucos de cocina. Más allá de su utilidad principal, los electrodomésticos esconden auténticos secretos. Y uno de los mejores guardados es que puedes hacer muchas recetas al microondas.
Si quieres ahorrar tiempo en la cocina, apúntate los siguientes trucos de cocina para sacar el máximo partido a tus electrodomésticos.
Pochar cebolla en el microondas
Si estás preparando un suculento plato, el cual quieres aderezar con una cebolla pochada el microondas puede convertirse en tu principal aliado. Para pochar cebolla en el microondas, debes cortarla, ponerla en un recipiente para microondas y añadirle aceite y sal. Tapa el recipiente y cocina la cebolla en el microondas a media potencia durante cinco minutos. Si pasado ese tiempo todavía no se ha pochado, vuelve a calentarla durante cinco minutos más.
Si quieres caramelizar cebolla en el microondas, simplemente añade azúcar y aceite y caliéntala a media potencia en intervalos de cinco minutos hasta que oscurezca. El resultado será brillante.
Madurar plátanos en el horno
Si necesitas un plátano que esté maduro, pero los que tienes en casa están todavía verdes no te preocupes, existe un truco de cocina espectacular. La solución está en tu horno, ya que el calor libera el azúcar que acelera el proceso de maduración. Para hacer que los plátanos maduren rápidamente en el horno debes realizar los siguientes pasos:
- Coloca los plátanos pelados sobre una bandeja cubierta de papel de hornear.
- Precalienta el horno a 150ºC.
- Mete los plátanos en el horno.
- Deja los plátanos en el horno 15 minutos.
Cubiteras con caldo en el congelador
Las cubiteras han dejado de tener una utilidad única. Más allá de servir para hacer cubitos de hielo, ahora puedes aprovechar sus huecos para congelar salsas o caldos en pequeñas cantidades que te pueden sacar de más de un apuro. Además, congelar los restos de salsas y caldos en las cubiteras facilita la dosificación en otros platos. Una vez congelados, puedes desmoldar los cubitos y guardarlos en bolsas en el congelador para que ocupen menos espacio.
