Es difícil encontrar a alguien a quien no le guste el pisto manchego. Es un plato muy sabroso y sano en el que, como no podía ser de otra forma, las verduras son las protagonistas. Son numerosas las recetas de pisto que hay en nuestro país, no sólo en Castilla La Mancha, y seguro que hay tantas versiones como abuelas pero lo que sí está claro es el común denominador de todas: los tomates y el pimiento. Aquí te vamos a contar una de ellas.
Ingredientes del pisto manchego de la abuela
- 1 cebolla
- 1 pimiento verde
- 1 kilo de tomates
- 1 calabacín
- 2 dientes de ajo
- Aceite de oliva
- Sal
- Pimienta
- Azúcar
Cómo hacer el pisto manchego de la abuela
La diferencia fundamental y lo que marcará el sabor de este pisto será cómo usamos el tomate. Lo cierto es que puedes usar una lata de tomate triturado pero si lo haces tú mismo lograrás un sabor mucho más bueno. Así, coge los tomates, hazles un corte en cruz y escálfalos. Cuando los tengas listos y fríos quítales la piel y los trituras. Reserva.
A continuación pica la cebolla, el pimiento verde y el ajo en trocitos pequeños para que se cocinen mejor y luego sea más agradable a la hora de comerlos. En una sartén o cazuela pon un chorro de aceite y cuando esté caliente añade la cebolla y el ajo y déjalo a fuego bajo. Cuando la cebolla esté transparente incorpora el pimiento y deja que se cocine despacito con la tapa puesta. Es importante que vayas removiendo poco a poco para que no se queme ningún ingrediente durante unos 10 minutos.
Mientras se cocina coge el calabacín y córtalo en cuadrados pequeños y añádelo a la sartén con el resto de verduras y deja que se cocine todo bien. Cuando lo tengas listo añade el tomate y un poco de sal. Si quieres rebajar el sabor del tomate puedes añadir una cucharadita de azúcar.
Es el momento de quitarle la tapa a la olla e ir controlando este rico pisto. Cuando los ingredientes ya estén bien mezclados y las verduras bien cocinadas es el momento de probar y rectificar de sal y pimiento.
El acompañamiento perfecto para este plato es un huevo frito o cocido y un poco de pan. Poco más hace falta para disfrutar de una de las recetas más ricas de la gastronomía de nuestro país. ¡Qué aproveche!
