Las freidoras de aire se han convertido en el electrodoméstico de moda en las cocinas de muchos hogares y cada vez son más las recetas que se pueden hacer en las 'air fryer' y el pollo asado es uno de los alimentos perfectos para cocinar en este tipo de freidora ya que utiliza mucha menos cantidad de aceite que en las convencionales. Sin embargo, su incorporación es tan reciente que todavía hay muchas dudas sobre cómo usarlas.

Cómo cocinar un pollo entero asado en una freidora de aire

Parece obvio pero es muy importante antes de comenzar a cocinar el pollo, tengas en cuenta cuál es el tamaño de tu freidora y el modelo. Lo importante es que el pollo entero quepa en rejilla de debajo. Si no es así, y la rejilla es más pequeña que la pieza de pollo, tienes la opción de cocinar la carne por partes. Otra de las instrucciones importantes para no cometer errores es prestar atención al tiempo de cocción.

Si el modelo de tu freidora tiene una resistencia arriba y otra abajo no necesitarás precalentar el aparato ni darle la vuelta a mitad del cocinado. Antes de meter la pieza entera o las porciones de carne, dependiendo del tamaño, no olvides rociar una mínima cantidad de aceite de 'spray' y selecciona la opción de tu freidora llamada 'roast' o de asado durante unos 60 minutos a 205 grados.

Un pollo asado recién horneado en la freidora de aire. GETTY IMAGES

Si no dispones de un modelo de freidora con doble resistencia que proporciona unos cocinados más rápidos, deberás precalentarla durante 5 o 10 minutos antes de introducir el pollo para que este no quede crudo y se haga correctamente. Igualmente que en el caso de las freidoras con doble resistencia, es fundamental rociar el recipiente antes con aceite en 'spray' y si lo deseas también puedes hacerlo después de meter el alimento en el aparato.

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En primer lugar, debes poner el pollo con la pechuga hacia arriba durante una hora, pero cuando hayan transcurrido 30 minutos debes abrir la freidora para darle la vuelta y dejarlo de nuevo la otra media hora restante. Este es un buen momento para aprovechar y aliñar de nuevo tu pieza de pollo, así conseguirás un mejor resultado final con un pollo más jugoso y con más sabor.

Transcurrido este tiempo de cocción, es el momento de sacarlo, acompañarlo de una buena guarnición, trocearlo y disfrutar de una versión mucho más saludable del clásico pollo frito.