Merecían un reconocimiento y su lugar sin que se perdieran en el tiempo. Porque no podían permanecer olvidadas en las hemerotecas ni un día más. Recuperarlas supone una apuesta firme por la gastronomía alicantina, pero también por una fuente inagotable de creatividad e inspiración para nuestros restauradores y aficionados. Aquellas recetas de esos históricos «Menjars de la Terra» de Antonio González Pomata, verán de nuevo la luz muy pronto.
Así lo anunció el presidente de la Diputación Provincial, Carlos Mazón, en el último encuentro de «Menjars de la Terra». Una apuesta singular por la recuperación de lo alicantino: «Se coleccionaban a través del diario INFORMACIÓN, algunos pueden pensar que han pasado a mejor vida y esto no lo podemos permitir. Por ello, el Instituto Alicantino Juan Gil-Albert publicará en el 2023 la recopilación de las recetas que González Pomata, desde el primer ‘Menjars de la Terra’, puso en marcha. Las atesoraremos como patrimonio de la provincia de Alicante».
El Capricho de Raquel, en la playa de Urbanova, acogió el homenaje a una de las personas que más ha trabajado por la difusión y promoción de la gastronomía alicantina, nuestro escritor y gastrónomo Antonio González Pomata. Él es también el alma mater de las jornadas que de la mano de INFORMACIÓN y con el apoyo de la Diputación ponen en valor el arte culinario de la provincia.
Por todo ello, este encuentro fue muy especial. El reconocimiento contó con una nutrida representación de la hostelería, que quisieron participar en el homenaje público a quien tanto hizo por el sector. Los chefs, como la estrella Michelin Susi Diaz, entre otros, quisieron devolver a Pomata lo que en su día éste les entregó. «Toda la restauración de aquella época le estamos muy agradecidos. Solía venir al Racó del Pla y fue allí cuando me trasladó la idea. Fue un antes y un después para la hostelería de Alicante y la provincia. Y esto se lo tenemos que agradecer, tanto a Pomata, como al periódico INFORMACIÓN, por esa labor que se hizo entonces y se sigue haciendo», comentó por su parte José Gómez, fundador del restaurante Racó del Plá, que habló en representación de todo el sector.
«Un sector maduro»
«Yo en 1987 tenía 13 años. He conocido muchos restaurantes de la provincia con esa edad porque mi padre cada vez que se celebraba un ‘Menjars’ de INFORMACIÓN, nos llevaba a la familia muchos domingos», compartió Mazón ante los comensales, quien ha apoyado la iniciativa desde el principio. El presidente de la Diputación no quiso ponerse como ejemplo, si no como representación de las muchas personas que, gracias a la iniciativa de Pomata en su día, comenzaron a valorar el arte culinario de los restauradores alicantinos.
«La gastronomía de Alicante es una de las señas turísticas por las que la gente acude a la provincia. Este renacimiento que hemos puesto en marcha con INFORMACIÓN coge una fuerza espectacular y va a más, porque habla de un sector maduro, que cuando tiene un reto lo alcanza con extraordinaria profesionalidad», añadió Carlos Mazón.
Por ello, en el merecido homenaje de Pomata, el presidente de la Diputación anunció que «en el ciclo de biografías de alicantinos ilustres del IAC Gil-Albert que han hecho algo extraordinario, el año que viene nos pondremos en marcha para que todo Alicante conozca no solo la obra si no la persona, y conoceremos que además de ser un gran crítico gastronómico, fue camarero y pescador, entre otras cosas». Tras el anuncio, el presidente entregó a la hija del homenajeado, Encarna González, quien acudió acompañada de varios nietos de Pomata, un recuerdo del reconocimiento de la Diputación e INFORMACIÓN a la figura de su padre.
Por su parte, el director del Club INFORMACIÓN, Toni Cabot, recordó con cariño a Pomata. «Quedé prendado de González Pomata mucho antes de conocerle personalmente. Asociado a un periódico, el mío, el diario INFORMACIÓN, y a una marca, Menjars de la Terra». Cabot asegura que tuvo la suerte de llegar más lejos, «tras coincidir con él, al poco de formar parte de la redacción de Doctor Rico, a finales de los 80». Y rememoró cuando «cada siete días aparecía un venerable señor menudo y silencioso de fina perilla blanca, como pintada en el rostro, al que los más veteranos veneraban a su paso». Con él tuvo una relación estrecha, ya que «un buen día fue a probar los manjares de mi tía Enriqueta, que preparaba en el restaurante de Aigües, en la plaza y frente a la Iglesia. A petición de Pomata, preparó una ‘borreta’. El único plato que no me gusta. Pero ni Pomata ni Mariano Soriano dejaron rastro de aquella receta que quedó inmortalizada en la hemeroteca de INFORMACIÓN. Pomata fue un adelantado a su tiempo, creó escuela».
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Homenaje al paladar
El Capricho de Raquel preparó un excelente menú donde las premisas de calidad, respeto a la cocina tradicional sobre las que se asientan las raíces de los fogones alicantinos y la vanguardia e innovación que exigen los paladares en la actualidad, quedaron emplatadas en todas y cada una de las elaboraciones.
Platos basados en la cocina tradicional, mediterránea y de mercado. El restaurante se abrió hace tres décadas en Alicante y ha conservado su modelo de empresa familiar pero siguen creciendo con una oferta singular, con Moments, y la próxima apertura de Bendita Gloria. Raquel, al frente del negocio, comenzó su andadura en el hotel que tenían sus padres en la aragonesa Calatayud.
Guiños a los productos autóctonos a través de platos como el «tomate de la huerta con pericana», el «carpaccio de gamba roja de Santa Pola» o la «ensalada de mango y granada mollar de Elche», entre otros, fueron bañados con vinos alicantinos e hicieron las delicias de los asistentes.
