La entrevista de Ortega Cano, que se produjo el viernes de la semana pasada en 'Viva el verano', sigue dando de qué hablar y no solo por las contradicciones en su testimonio respecto al diario de Rocío Jurado. El diestro, llamó el día siguiente a 'Viva la vida' para desdecirse y negar la existencia de dichos documentos con una actitud muy diferente a la que había mostrado la noche anterior.

Este cambio de humor repentino no sentó bien a su presentadora, Toñi Morenoque quiso explicar este sábado 28 de agosto cómo se gestó la entrevista: "Entró enfadado, como si le hubiéramos obligado a venir, pero voy a decir cómo se gestó esa entrevista. Me acerqué a su casa a hablar con él y le dije al Maestro que viniera porque interesaba su testimonio después del documental de Rocío Carrasco".

La andaluza, siguió con sus explicaciones y comentando la actitud de Ortega posterior a la entrevista: "Le dijimos que le íbamos a hacer una entrevista que yo creo que fue amable. Se fue contento, no vetó a ningún colaborador ni ningún tema, pudimos preguntar con libertad, hice las pregunta que creía que teníamos que hacer". Además, Moreno dio su opinión sobre cuál cree que es el motivo de enfado del torero: "Yo creo que a él lo que le duele es que al día siguiente destacan lo que te pasó en el programa", le dijo a Ana María Aldón, que estaba presente en plató.

Sin embargo, esta lanzó un dardo al programa: "De lo que se hacen eco es de que yo me sentí ninguneada. No me sentí ninguneada, pero sí hubo un momento en la entrevista en el que me sentí muy pequeñita cuando hablaba de su mujer, de que era el amor de su vida".