El restaurante de 'First Dates' es un sitio en el que una cita puede estar predeterminada al fracaso desde el principio. Este es el caso de Mariví, una jubilada castellonense de 48 años, que llegó al local asegurando que cree que está soltera por su genio: "Que tengo mucho, y asusto a los hombres. Quiero una relación con un amigo, un amante... lo quiero todo. Me gustaría que mi cita fuera pasional y cariñoso".

Solo instantes después de presentarse, el fracaso de la cita se empezó a gestar cuando Frantxu, un carretillero alicantino de 47 años, que llegó con una máscara y un cinturón de lucha libre al grito de 'lucha, lucha, lucha'. "Hostias... no me jodas...", aseguró Mariví, mirando con cara de no saber dónde meterse a Matías Roure.

"Me quería morir. He pensado 'tierra, trágame', me voy de aquí, pero bueno... es que ha sido muy fuerte con ese cinturón... casi me da algo", reconoció la mujer de Castellón cuando se encontraba sola ante las cámaras de 'First Dates'.

"Es un cinturón del campeonato por parejas, y como estoy soltero, estoy buscando una compañera para la batalla de la vida", explicó Frantxu nada más entrar en el restaurante con este atuendo tan llamativo"Cuando se ha quitado la máscara tampoco me ha gustado físicamente", afirmó Mariví en un nuevo total.

Una vez sentados en la mesa que 'First Dates' les reservó, lo cierto es que el encuentro no mejoró en ningún. De hecho, Frantxu le desveló a Mariví que era muy fans de Marvel, 'Star Wars' y 'El señor de los anillos', dato que sentenció la cita para Mariví: "Le he dejado hablar porque yo, me habría levantado y me habría ido".

En los últimos minutos, sus diferentes personalidades fueron trascendentales en 'La decisión final' de la cita. Frantxu sí quiso tener una segunda cita con Marivi pero ella, en cambio, tras verle y escucharle a lo largo de la noche, prefirió marcharse sola del restaurante de 'First Dates': "La entrada me ha impactado bastante".