La karateca española Sandra Sánchez ha ganado el oro en la modalidad de kata en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, donde el karate se estrena como deporte olímpico. La talaverana, número uno del mundo, suma así la 55ª medalla de su vida, y la más importante.

"Ahora mismo siento felicidad, emoción y nervios. Estoy más nerviosa que cuando estaba haciendo los katas. Siento muchas cosas en el estómago y en la cabeza", explicaba antes de la final en el Nippon Budokan, el templo de las artes marciales, donde el judo se estrenó en los Juegos de Tokio de 1964 y donde ha debutado el karate. La talaverana ha aprovechado la única oportunidad que tenía: cumplirá los 40 en septiembre y, tras el debut del karate en Tokio como deporte de exhibición, volverá a desaparecer el programa olímpico en París 2024.

Sandra ha sido siempre una luchadora con las ideas muy claras. Con cuatro años se rebeló contra sus padres, que la habían apuntado a ballet. Con 20 años entró en el Centro de Alto Rendimiento (CAR) de Madrid y al mes se marchó porque a su madre le diagnosticaron un cáncer de mama. Decidió abandonar la residencia de atletas para estar a su lado en su Talavera natal y la Federación de entonces le cerró las puertas de la alta competición. Ahora, con 39, puede darle a esa Federación la primera medalla olímpica. Desde que se proclamó campeona de España con 32, no se ha bajado del podio.

Inició su andadura olímpica con el kata 'Kururunfa', que valió una puntuación de 27.26 para los jueces -19.04 de rendimiento técnico y 8.22 de rendimiento deportivo. Posteriormente, desplegó el 'Suparinpei', donde exhibió seguridad sobre el tatami con movimientos limpios que le dieron un 27.60 de puntuación -19.32 y 8.28- y le devolvieron al liderato tras la segunda ronda de katas. De esta manera, Sánchez, la gran favorita al oro como vigente campeona del mundo y hexacampeona de Europa, avanzó a la ronda de clasificación.

Allí, logró un 27.86 -19.46 y 8.40- con el kata 'Papuren', uno de sus favoritos, con el que mejoró las notas de la karateca de Hong Kong Mo Sheung Grace Lau (26.40) la estadounidense Sakura Kokumai (25.54). En la final ha derrotado a Kiyou Shimizu, la gran estrella local, que calcó la nota de Sandra en la clasificación. En la final la manchega ha mejorado su nota, clavando su ejercicio con 28.06, mientras su rival se ha quedado con 27.88.

Damián Quintero, a por el doblete

Damián Quintero, que también es el mejor del mundo en kata, puede dar el doblete en categoría masculina. España no tiene representantes en kumite, combate. Ángel Arenas, seleccionador español de karate, presentó hace un par de meses su dimisión de su cargo tras los hechos acontecidos en el campeonato de Europa, en los que el equipo masculino decidió no presentarse a disputar la medalla de bronce acusando a Arenas de insultos racistas. La Federación les apartó temporalmente. Y en categoría femenina Carlota Fernández (-55 kg), Cristina Ferrer (-61), María Torres (+71) y Matías Gómez (-67) fueron eliminadas en el preolímpico.