Durante la pasada madrugada, Teresa Perales sufrió una situación de estrés y ansiedad por la que tuvo que ser tratada por los servicios médicos del Equipo Paralímpico Español y por los de la Villa Paralímpica. Tras realizarle diferentes pruebas y llegar a un diagnóstico, la aragonesa quedó ingresada y en observación en la Policlínica de la Villa.

Según las mismas fuentes, si la evolución de la nadadora zaragozana sigue siendo positiva está previsto que viaje este lunes de regreso a España con el resto de la delegación. Teresa Perales ha vivido en Tokio sus Juegos más complicados. Una lesión en el hombro puso en entredicho su participación. Incluso ella misma explicó que en su día la reunieron para plantearle que se quedara en casa al no estar en plena facultad física.

Pero Teresa es testaruda y se negó a quedarse en Zaragoza. Luchó como nunca para conseguir estar en Tokio y con la plaza ganada se vino a los Juegos convencida de que lo conseguiría. Así fue y ganó una importante plata en los 50 espalda S5, una medalla que cerró muchas bocas. También tenía la ilusión de nadar el 4x100 ya que era la última vez que se disputaba. Ahora mismo suma 27 medallas paralímpicas, a una de las 28 de Michael Phelps, el récord olímpico.