Elegía a Ramón Castañer

El gran pintor alcoyano, el mayor muralista que ha dado nuestra ciudad, ha muerto. Tras varios años de sufrimientos su colorista paleta se transformó en un glaucoma penetrante y atroz. Hace tan solo unos días me llamó por teléfono y se alegraba de haber recibido un CD con 25 canciones alcoyanas. -En Cá Matarredona, La manta al coll, Les xiques del Bambú, Ja Baixen les Tomasines, etc, y al final el Himno de Fiestas y el Himno Regional-. Oír estas canciones ha sido una auténtica gozada. Quizá el día mas feliz -me dijo-, camino, como estaba ya, del tránsito, porque Ramón sabía que tenía los días contados.

Con Castañer se nos va un pintor de raza, que tocó todos los palos, el mural, el retrato, el paisaje, el abstracto, el bodegón. Todo lo que tocaban sus pinceles se transformaba en arte.

Ramón fue para mí mas que un amigo, un hermano. De pequeños, ya en la infancia sufrimos la guerra incivil, correteando por la Glorieta. Se me agolpan los recuerdos, los buenos días, las anécdotas, las tertulias, las cenas en su antiguo estudio de la entonces calle Fernán Caballero, donde con Pepa y Lolín, nuestras respectivas mujeres, pasamos estupendas veladas. Quiero evocar uno de los poemas favoritos tuyo y mío: "Y pensar que después que yo me muera, aún surgirán mañanas luminosas".

Y surgirán nuevas paletas con mezclas de otros colores y pinceles nuevos, y, sin embargo, no todo será igual porque tu no estarás, hermano, amigo entrañable, aunque haya nuevos azules y tu frondosa humanidad se habrá ido a la tierra, de donde venimos los humanos -tierra eres y en tierra te convertirás-, ojalá nos encontremos un día en la eternidad y nos volvamos a dar un abrazo de bienvenida en un mundo mejor.

Deduzco que pasará el tiempo y no vendrás para alegrar mi soledad, por eso hoy lloro tu pérdida, tu adiós, tu amistad. La melancolía, hoy finales del año 2011, me invade y me asaetea el corazón. Te juro que jamás galopará mas tu figura por tu masía de Agres, y nada será igual.

Pepa, besos; Ramón, abrazos. Nos veremos, pero, ¿Cuándo?.

Adiós. Os quiero.