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La patria de Ratcliffe

El británico más rico, partidario del "Brexit duro", se deslocaliza a Mónaco

El dinero no tiene patria porque es una patria en sí mismo para personajes como Jim Ratcliffe, el más acaudalado de Gran Bretaña (23.000 millones de euros amasados con el grupo pretroquímico Ineos). Ratcliffe, que se crio en una vivienda protegida de Manchester, ha trasladado la sede fiscal de sus negocios de Londres a Mónaco, para sacar jugo del paraíso tributario de los Grimaldi.

El multimillonario deja claro así que su dinero es su patria y lo hace después de haber arengado al sector del partido conservador que defiende un "Brexit duro" (salida abrupta de la UE) y de contribuir con ello a inflamar una espiral de nacionalismo que seguro conducirá al empobrecimiento de una parte de la sociedad británica.

Ratcliffe quizá pueda compensar los efectos adversos que pudiera tener el "Brexit" en sus negocios -Ineos tiene buena parte de sus fábricas y mercados dentro de la UE- ahorrando en impuestos desde Mónaco, una de esas patrias que viven de desgastar los ingresos fiscales de otras. A los británicos les indignará el doble filo de Ratcliffe, pero al conjunto de los europeos debería encendernos más la parasitaria vecindad de lugares como Mónaco. También la de estados que, formando parte de la UE, tienen maneras tributarias propias de territorios "off-shore": la fiscalidad a la carta de Luxemburgo, el 12,5% del impuesto de sociedades de Irlanda...

Indígnense los británicos con sir Ratcliffe y el resto indignémonos con Mónaco y sus homólogos. Dos sugerencias para empezar: dejemos de consumir información sobre la familia Grimaldi y su "Baile de la rosa", y pidamos cuentas cada vez que en la televisión pública un periodista del corazón comenta, casi con pena, que el hijo de la baronesa Thyssen, Borja Thyssen, y su esposa, Blanca Cuesta, tienen que vivir su amor separados "por razones fiscales" (él en Andorra, ella en Madrid), para que él vástago de Tita Cervera pueda eludir los impuestos españoles acreditando que su residencia está en el paraíso fiscal pirenaico. Será legal, pero es muy antipatriótico.

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