La principal herramienta de la Conselleria de Sanidad para detectar el covid ha colapsado. Los test PCR que estaban predestinados a detectar rápidamente la enfermedad para actuar con eficiencia y que los rastreadores la contuvieran son un fracaso.
No se puede usar otra palabra cuando en la provincia de Alicante Sanidad tarda ocho días en comunicar a un paciente si el resultado de su test ha sido positivo o negativo. Ocho días perdidos para tratar al enfermo si está contagiado, ocho días desperdiciados para los rastreadores que no podrán controlar con quiénes estuvo ese día, ocho días en los que desde la sanidad pública valenciana se está favoreciendo la propagación descontrolada del virus. Increíble e inaceptable.
Quien decidió que solo el Hospital General de Alicante realizara en la provincia las analíticas del covid se equivocó. Quien no ha puesto los medios necesarios de personal y aparataje para evitar el colapso en el que vive el departamento que tiene que facilitar los resultados de los test debe dar explicaciones por su imperdonable falta de previsión. Quien no se ha tomado la molestia de acelerar la acreditación del Instituto de Neurociencias para trabajar en las analíticas, pese a que el centro de investigación se ofreció a la conselleria en plena pandemia, debe asumir la responsabilidad que pueda tener en este desastre que evidencia que a la Conselleria de Sanidad le viene grande la gestión del momento presente.
Ocho días de retraso es un dislate cuando el resultado de un test urgente de PCR debe estar en tres o cinco horas. Gestionar la sanidad tiene que ser algo más que dar el parte diario de contagios.
¿En qué ha quedado la mayor oposición de la historia con 13.000 plazas para luchar contra la pandemia? ¿Se han reforzado las UCI? ¿Las Urgencias? ¿Hay más médicos y enfermeros en Atención Primaria para lo que se nos viene encima en otoño? A tenor de cómo están los profesionales, es muy probable que la respuesta sea en todos los casos negativa. Señora Ana Barceló, estoy convencida de que en esta situación tan complicada usted lo está haciendo lo mejor que sabe, pero quizás haya alguien que sepa más que usted. Piénselo. Hay muchas vidas en juego.
