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Lorena Gil López

El 14-M hace un año: silencio, aplausos, miedo

La gente haciendo acopio en los supermercados, las calles vacías, las ovaciones en los balcones y las primeras sanciones: así arranco el estado de alarma

La Explanada, en Alicante, casi vacía hace justo un año. A la derecha, los clientas forman colas para entrar a comprar en un supermercado. | ALEX DOMÍNGUEZ

Un año ya. El fin de semana del 14-15 de marzo de 2020 puso patas arriba nuestras vidas, palabras como confinamiento o estado de alarma llegaron para quedarse por una larga temporada... y nos pilló por sorpresa, sin saber muy bien qué hacer. El sábado 14 de marzo hizo que un miedo inexplicable se apoderara de miles de personas, que salieron en tropel a los supermercados y tiendas a hacer acopio de alimentos y productos de primera necesidad. ¿Recuerdan las colas a la entrada? ¿Las luchas por conseguir paquetes de rollos de papel higiénico?

También fue el fin de semana en que los ayuntamientos cerraron las playas, acordonando los accesos, y zonas emblemáticas de las ciudades, como la Explanada en Alicante o la Glorieta en Elche, dejaban una estampa fantasmagórica, sin viandantes por las calles y con el silencio adueñándose de la escena.

Aunque los había que estaban en su mundo, como los guiris en Benidorm, que seguían llenando carros de la compra con bebidas alcohólicas y se concentraban en las proximidades de la playa de Levante para consumir, ajenos al coronavirus.

Sanitarios devuelven los aplausos a los vecinos que están en sus balcones la noche del 15-M a las puertas del Hospital General de Alicante. A la derecha, la Unidad Militar de Emergencias desinfecta la estación del Tram de Luceros, en la capital. | RAFA ARJONES/PILAR CORTÉS

Pero del miedo a lo desconocido y la incertidumbre también surgió el reconocimiento a los héroes de la pandemia: los sanitarios. El domingo 14 fueron solo unos pocos los que, espontáneamente, desde sus balcones se lanzaron a aplaudir a los profesionales, reconociendo su valiosa labor. Pero a lo largo de los días se fueron sumando miles y miles de personas, cada tarde a las 20 horas, en una acción que daba fuerzas a los que se quedaban sin ella.

El 14-M hace un año: silencio, aplausos, miedo

Y ese fin de semana también fue el de los despistados o el de aquellos que consideraban que el estado de alarma no iba con ellos, y podían salir a la calle y hacer vida normal como si tal cosa. Así que la Policía empezó a poner las primeras multas a quienes seguían en la vía pública sin motivo justificado. En ese sentido, poco ha cambiado desde entonces, siguen habiendo una minoría que considera que está por encima de la ley. La imagen de agentes desplegados en las calles de las ciudades para controlar el cumplimiento del estado de alarma se ha hecho ya rutinaria.

Y así transcurrió, más o menos, el primero de los muchos fines de semana en estado de alarma y confinamiento. ¿Lo recuerdan o han preferido olvidar?

El 14-M hace un año: silencio, aplausos, miedo

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