Este 30 de noviembre se han cumplido 21 años de la declaración del Palmeral de Elche como Patrimonio de la Humanidad. Ese día del año 2000 el Comité de Patrimonio Mundial de la UNESCO, reunido en la ciudad australiana de Cairns, incluyó a Elche en el exclusivo grupo de los lugares que se han hecho merecedores de esta distinción.
En el caso del Palmeral ilicitano, uno de los valores que los miembros del Comité tuvieron en cuenta fue que constituye “un ejemplo destacado de transferencia cultural de un paisaje típico de una cultura y de un continente a otro, según palabras de Henry Cleere, coordinador de Patrimonio Mundial del Instituto Técnico ICOMOS, quien destacó también el mérito de haber conservado en funcionamiento hasta la actualidad el antiguo sistema de regadío árabe. Un mérito que hay que reconocer a nuestros agricultores, quienes han mantenido la estructura tradicional de los huertos de palmeras árabes, no solamente afrontando dificultades sino también habiendo experimentado la pérdida de rentabilidad que este cultivo tuvo antaño.
Especialmente hay que destacar la labor que han desarrollado ininterrumpidamente durante siglos generaciones de palmereros, que han permitido que en la actualidad Elche disponga del mayor Palmeral de Europa. Y el trabajo artesano desarrollado por las familias que se dedican a la elaboración de la palma blanca, que han sabido conservar esta tradición y han logrado su proyección nacional e internacional.
Gracias al esfuerzo conjunto de todos podemos sentirnos orgullosos de disponer de un Palmeral Patrimonio de la Humanidad del que ahora celebramos el XXI aniversario. Pero este honor supone igualmente tener una gran responsabilidad. Somos los encargados de proteger, conservar, promocionar y legar a las futuras generaciones este preciado bien. Se está trabajando en este cometido. Así, se ha instalado el Museo del Palmeral en el Hort de Sant Plàcid, se ha creado la ruta del Palmeral, se ha promocionado la artesanía de la palma blanca, se ha luchado contra plagas, se han realizado campañas para el conocimiento del Palmeral y se está invirtiendo en los medios necesarios para la conservación y mejora de este Patrimonio.
Y, coincidiendo con este aniversario, disponemos ahora de una herramienta que nos permite preservar mejor nuestro patrimonio. Se trata de la nueva Ley de Protección y Promoción del Palmeral de Elche, que fue aprobada el pasado 28 de octubre en Les Corts Valencianes por 62 votos a favor (PSOE, Compromís, Podemos y Ciudadanos) y 33 abstenciones (PP y Vox) durante el transcurso de una sesión histórica para nuestra ciudad y a la que asistí personalmente junto con otros miembros del equipo de gobierno municipal.
Esta Ley permitirá dar respuesta a algunas de las necesidades que tenemos en la actualidad. En primer lugar, define con claridad el régimen de protección del Palmeral, al que califica como Bien de Interés Cultural (BIC) Espacio Etnológico. Además, contempla como BIC al oficio de palmerero o palmerera, lo que supondrá su regulación y la garantía de continuidad en el futuro. Incluye como BIC a todo el sistema de riego asociado al Palmeral, con lo que se amplía el área protegida. Y declara Bien de Relevancia Local a todos los huertos, grupos de palmeras y palmeras que se encuentran diseminados por todo el término municipal de Elche.
La nueva Ley, publicada hace solo unos días, el 18 de noviembre, sustituye a la que estaba en vigor desde 1986 y presenta una diferencia fundamental: contempla el Palmeral en su conjunto como un paisaje cultural, lo que significa que integra a todos sus componentes tanto agrarios como culturales o ambientales. Define los usos que se puede dar al Palmeral e impide el menoscabo de los huertos históricos al tiempo que promueve la integración paisajística de aquellos huertos que tienen edificaciones.
Junto con este marco legal, el Ajuntament d’Elx está trabajando para reforzar la conservación y mejora de nuestro patrimonio. En este sentido, hay que recordar que se ha iniciado la elaboración del Plan Especial de Protección del Palmeral, que es uno de los elementos principales, junto con el Plan Rector de Uso y Gestión, del Plan Director del Palmeral previsto en la Ley.
Todas estas acciones están encaminadas a mantener nuestro Palmeral como un legado para las futuras generaciones, de manera que podamos seguir sintiéndonos orgullosos y orgullosas de poseer este Patrimonio de la Humanidad que constituye uno de los símbolos identitarios y colectivos de Elche.
