“Hay que recuperar, mantener y transmitir la Memoria Histórica, porque se empieza por el olvido y se termina por la indiferencia” (José Saramago)
Hoy es un día de sentimientos encontrados, de recuerdos y de anhelos. Últimamente nuestro presente nos duele y nos acerca a momentos que la Memoria no nos permite, ni nos deja, caer en el olvido. Hoy son muchos los corazones que se unen de una manera u otra para rendir homenaje a numerosas historias de vida que forman parte de nuestra memoria colectiva como pueblo. Hoy también es un día de homenaje a todas las asociaciones de familiares que con su incansable trabajo no han permitido que triunfe el olvido. Gracias
Me vais a permitir que haga una breve reflexión acerca de la importancia de esta conmemoración. En primer lugar no puedo dejar de poner en valor el trabajo que desde la Generalitat, desde el primer Govern del Botànic presidido por Ximo Puig, se viene realizando con el objetivo de dignificar y recuperar la Memoria Democrática del Pueblo valenciano y que tiene como hito histórico la aprobación de la “Ley 14/2017 de memoria democrática y para la convivencia de la Comunitat Valenciana”
Esta Ley nos ha permitido trabajar desde las instituciones en favor de la verdad, de la justicia y de la reparación. En ella se pone de relieve que la Memoria Democrática no es un concepto atribuible a la voluntad de una parte u otra de la sociedad, sino que forma parte de nuestro ordenamiento jurídico. Todas y todos estamos implicados en ella y por eso debe construirse de manera colectiva y sin otra finalidad que la búsqueda de la verdad, hacer justicia, y reparar el dolor, reafirmando los valores que nos unen como Pueblo y como Sociedad.
Incide esta Ley en que son las instituciones públicas las que deben impulsar este tipo de actos de reconocimiento y homenaje, para así mantener la memoria, reivindicando los valores democráticos y la lucha del pueblo valenciano por sus libertades. Recoge en el artículo 23, que el 28 de marzo sea el “Día de recuerdo y homenaje a las víctimas de la guerra civil y de la dictadura”. Esta elección no es casual.
Conmemoramos dos acontecimientos: uno de carácter colectivo y otro individual. Ambos son de vital importancia para la memoria de esta ciudad, del pueblo valenciano y de la historia de nuestro país.
El acontecimiento colectivo al que me quiero referir es que la tarde de un día como hoy, en 1939, zarpó desde el puerto de Alicante, el Buque Stanbrook con destino, primero a las Islas Baleares y después, tras el cerco de la flota franquista, hacia el puerto de Orán.
El segundo acontecimiento que nos acompaña en este día, es que el 28 de marzo de 1942 falleció, el poeta del pueblo, Miguel Hernández. Su muerte puso fin a la vida de una persona que encarnó en su trayectoria todos los valores que caben resaltar en un día como hoy. El poeta del pueblo fue un genio de la literatura y desde la humildad abanderó el compromiso y la lucha por la defensa de los valores democráticos. Eso le acarreó una vida de penurias marcada por la guerra y la cárcel que derivó en la enfermedad y la muerte. Miguel Hernández es un símbolo universal de todas aquellas ideas que nos representan como Pueblo.
Todo esto es lo que hoy recordamos. Recordamos y honramos para que la memoria no sea algo del pasado, sino fruto de un constante ejercicio de construcción colectiva.
Para el Gobierno del Botànic, a pesar de las dificultades vividas y que aún nos acompañan, esta legislatura está siendo la del despliegue y desarrollo de los objetivos marcados en la Ley. Se ha marcado en la agenda política los trabajos en favor de la Memoria.
No vivimos tiempos que nos permitan descuidarnos en los avances, reformas y protección de nuestros valores democráticos. En ellos también son importantes lo que representa la Memoria Democrática. Continuamos.
