No sé si a ustedes les han llamado alguna vez estajanovistas. A mí sí. Se trata de alguien que no para de producir. El amigo que me adornaba con la palabreja se refería a mi hábito de publicar columnas diarias aquí, allá o acullá, durante más de treinta años. Alfonso Arús iniciará la temporada añadiendo a sus cinco programas semanales otro más para cubrir las tardes de La Sexta. No sólo eso. Recordando que si por su productora fuera, Aruba, comenzaría a las siete de la mañana, y no media hora más tarde, como sucede en la actualidad.

El secreto estriba en hacer lo que te gusta. Disfrutar con lo que haces. Sin jefe que te mande. Puesto que el jefe supremo es él mismo, y la que manda en la empresa su mujer, Angie Cárdenas. Si a eso añadimos que sus hijos se incorporaron al equipo, y también se fueron agregando amigos, el resultado no podía ser más que gratificante. Veinte años de éxito, primero en la televisión privada catalana y después, y ya van cuatro, en la privada nacional. Sólo hubo un pinchazo. Antena 3 le brindó la posibilidad de pasar al prime time, pero el invento sólo aguantó dos entregas. En ese horario no hay paciencia.

Lo de las tardes de los sábados será distinto. Valga como ejemplo lo sucedido con La roca, que inició sus emisiones los domingos de septiembre con un escaso 3% de cuota de pantalla y sin embargo completó temporada hasta junio. Seguro que el equipo de Arús es descubierto por quienes no lo pueden seguir los matinales laborables y se puede hacer con un público ahíto de programas en directo en esa jornada festiva. Con 61 años, Arús sólo piensa en trabajar divirtiéndose.