Petra Martínez y Juan Margallo lograron el Premio Nacional de Teatro. Pero los espectadores del informativo más visto del país, el de Antena 3, no fueron informados de ello. Estas noticias, que logran cifras estratosféricas, que pasan sobradamente del 21% de cuota de pantalla cada día, frente al humilde 10% que a duras penas consiguen los Telediarios, no incluyen ningún tipo de información cultural. Ni lanzamientos de libros, por muy famosos que sean sus autores; ni exposiciones singulares; ni festivales de cine, aunque sean de clase A. Lo único que citaron de San Sebastián fue su serie La ruta (producida por ellos) y cuando digo citado es textual. Se limitaron a mencionarla, sin más.

Que la audiencia soberana se permita el lujo de elegir día tras día, y van varios años, tanto por la mañana como por la noche, un informativo que prescinde de la cultura, es algo llamativo. Solamente por las cuatro piezas culturales que el de La 1 incluye en cada matinal, ya merece la pena sintonizar con él. Sin hablar de la enorme red de corresponsales, tema en el que ahora no vamos a entrar. Hablamos de cultura. ¿Cómo es posible que espectadores que no leen la prensa, que se alimentan exclusivamente a través de la televisión, puedan permitirse como única fuente de información la de los noticiarios líderes del país? Esos que jamás van a realizar con mimo y reposo una pieza sobre un pintor, una biografía o un centenario.

Si me preguntan por qué se ven tan poco los informativos de La 1 y tanto los de Antena 3, lo atribuiría a la enorme inquina que existe en la calle hacia el presidente Sánchez. Y soy un radar viviente que capto lo que bulle en las redes y en la vida.