Cómo se fabrica una guerra

Una imagen de la quinta temporada de 'The Crown'.

Una imagen de la quinta temporada de 'The Crown'. / Netflix

Luis Segovia

Luis Segovia

En la extraordinaria serie “The Crown” que en algunos de sus capítulos se alcanza un estado de gracia cinematográfica, como dice Carlos Boyero, por su inigualable guion (intervienen más de siete escritores e historiadores), estupenda puesta en escena y magnífica interpretación, donde vivimos un verdadero trozo de historia de Inglaterra y especialmente de la casa real desde 1940 a la actualidad. En uno de sus capítulos nos muestra con autenticidad histórica cómo si desarrolló la guerra de Suez de 1956. Nasser había dado un golpe militar destronando al monarca corrupto Faruk, e impuso un régimen socialista, una de cuyas primeras medidas fue la nacionalización del canal de Suez y el proyecto de la inmensa presa de Asuán. El primer ministro británico Eden toma la decisión de retirar los prácticos ingleses y franceses del canal, pensando que de esa manera se paralizaría el tráfico y además instiga a los bancos occidentales para congelar los créditos a Egipto. Pero la URSS envía técnicos rusos para la gobernanza del canal y le concede un cuantioso crédito en inversiones para hacer la presa. Ante ello decide el gobierno inglés declarar la guerra a Egipto para recuperar el canal y el poder imperialista. Eden le comunica a la reina Isabel, que es inminente una invasión de las tropas inglesas y francesas a Egipto para poner paz en la guerra que mantienen Israel y Egipto en el Sinaí, actuando como árbitros. Pero la reina le somete a un duro interrogatorio. Le inquiere que Israel nunca habría acudido sólo a esa guerra, y si efectivamente ha habido un previo pacto con Israel; ante el silencio del primer ministro, la reina le insiste y le conmina a que le diga la verdad, entonces le responde que efectivamente ha habido un pacto previo con Francia e Israel para que primero ataque con motivo de actos de terrorismo de los palestinos ayudados por los egipcios; también le responde que la intervención inmediata no se había dado a conocer al parlamento ni a la ONU, cuando cree Eden que la reina le va a reprender por todos estos actos, le tranquiliza diciéndole la reina que siempre estará de acuerdo con su primer ministro y el gobierno (inutilidad de la monarquía).

La victoria de la coalición es total, pero no había contado con la oposición, tanto de la URSS donde peligraban sus inversiones en la presa de Asuán, como de EEUU por los actos de desestabilización del canal que impedía que sus petroleras y navíos pudieran transportar el petróleo por el canal de Suez; así que obligan a los combatientes a retirarse, y así lo efectúan, costándole el cargó a Eden pues no tiene más remedio que dimitir ante la pérdida de vidas humanas y de alto coste sin ningún resultado, dónde empieza la decadencia del imperio británico y aparece como potencia mundial de segundo orden.

Como cuento histórico se puede decir que Trump, enemigo de alianzas internacionales quiere que desaparezca prácticamente la OTAN no aportando ni un céntimo, y siendo amigo íntimo de PUTIN que le ha ayudado en su elección, le promete que no intervendrá en la posible invasión Rusia sobre Ucrania, para terminar con la guerra civil que mantiene el ejército del gobierno ucraniano, nacido de un golpe de estado, con la regiones prorrusas del este de Donbás y de Crimea que dura 8 años causando más de 15.000 muertos. Y esto aclara cómo la CIA sabe antes que ninguna embajada que Rusia va a invadir Ucrania. Pero se encuentra con que ha cambiado el Presidente de Estados Unidos, y Biden es partidario de la OTAN y de su fortalecimiento con la mayor unidad europea, y envía miles de millones de dólares en armas modernas y sofisticadas que impide el paseo militar que se prometía Putin, estancándose en una guerra injusta y cruel, y produciendo una crisis económica europea, en que países neutrales como Suecia y Finlandia soliciten el ingreso inmediato en la OTAN.