Cruce de trenes

Seis y media de la tarde en la estación de tren de Adif de Alicante. Atención, porque en unos tiempos cambiantes donde nada perdura sucede lo que comienza a ser un clásico desde hace veinte años. El cruce de dos trenes Media Distancia. Uno que viene nada menos que desde Zaragoza con destino a Cartagena. El otro que procede de Cartagena y viaja con destino a la estación de Valencia-Nord.

Pues bien, el cruce de las seis y media nunca tiene lugar a esa hora. Ya ha entrado en funcionamiento el Avant que descongestiona los trayectos entre Alicante y Murcia por una vía paralela, pero no hay solución. La vía única, la ausencia de vía doble a lo largo de toda la provincia de Alicante, ya sea para ir a Elche, haciendo el correspondiente retranqueo en San Gabriel, o saliendo por San Vicente en dirección a Elda-Petrer y Villena, provoca paradas y retrasos inevitables. 

El caso del Media Distancia que viene desde Zaragoza es de libro. Sale a las 10 de la mañana desde la capital aragonesa, y funciona como un reloj suizo hasta que llega a las puertas de Alicante. Sí. Es justo en La Encina donde comienzan los problemas y los retrasos. El Media Distancia procedente de Cartagena viene siempre mal. Hay días que ambos están varados en sus andenes de la estación de Alicante ¡a las 7 de la tarde!

En los últimos 50 años todo se planificó mal. Se ha pecado de omisión. No se han llevado a cabo las obras urgentes necesarias, como el desdoblamiento de las vías o la electrificación de Alicante a Murcia. Lo ejecutado (ejemplo, las estaciones de Matola y Villena AV) ha sido desastroso. ¿Ahora quien da marcha atrás y comienza de cero?