Temes des d'Elx

Cambios en el Ayuntamiento de Elche

Que el PSOE pierda la Alcaldía de Elx es casi insólito. Desde 1979 sólo había ocurrido en una ocasión.

Pablo Ruz, en la sede del PP de Elche la noche del 28M

Pablo Ruz, en la sede del PP de Elche la noche del 28M / Antonio Amorós

Joan Antoni Oltra Soler

Joan Antoni Oltra Soler

Uno de los lugares donde el 28 de mayo va a producir cambios es Elx. El resultado de las municipales hará que el PP, que sacó 11 concejales pueda, con el apoyo de los 3 que tuvo Vox, acceder a la Alcaldía con Pablo Ruz y con mayoría absoluta, en sustitución de Carlos González, del PSOE

Y esto será a pesar de que el PSOE ganó las elecciones en Elx. Sacó 12 concejales, los mismos que tenía, aunque aumentó en más de 6.000 sus votos y mejoró su porcentaje en casi dos puntos, hasta llegar al 38,66%. Sólo el hecho de que su socio de gobierno, Compromís, perdiera uno de sus dos concejales, permite que la derecha y ultraderecha alcancen la Alcaldía. Las declaraciones de Feijoo en el sentido de que «debe dejarse gobernar a la lista más votada», parece que sólo es de aplicación si le interesa al PP. Es una propuesta selectiva.

Estas elecciones han sido influidas, excesivamente, por la política estatal. Los problemas municipales o autonómicos han sido postergados. Lo importante era lo de Bildu, el Falcon, el voto por correo en Melilla y similares. Temas trascendentales. Hay que reconocer el éxito de las derechas en haber conseguido que el debate fuera ése y no la sanidad, educación, servicios sociales, etc. Ahora es cuando empiezan a aparecer sus pretensiones: privatizaciones, recortes, prolongación de concesiones en hospitales (Vinalopó, por ejemplo) y eso que VOX todavía no ha dicho todo lo que quiere deshacer.  

Que el PSOE pierda la Alcaldía de Elx es casi insólito. Desde 1979 sólo había ocurrido en una ocasión. En 2011, con Mercedes Alonso, que llevaba a Pablo Ruz en su equipo. Debe haber pocos Ayuntamientos grandes en que esto ocurra. Y, además, sacaban amplias mayorías absolutas. Y se decía que, en Elx, hasta las palmeras votaban socialista. Curiosamente, la situación del palmeral ha ido empeorando estos años, al igual que los resultados electorales del PSOE, y es que ya nada es como era, todo necesita más atención y mejoras.

Diego Macià saluda a Carlos González la noche del 28M en la sede del PSOE de Elche

Diego Macià saluda a Carlos González la noche del 28M en la sede del PSOE de Elche / Matias Segarra

Hay otros datos del 28 de mayo que también resultan llamativos: Si se comparan los votantes con los de 2019, ahora han votado casi 11.500 personas más, es un número importante, resultado no sólo del aumento del censo sino, especialmente, del aumento de la participación en Elx, que ha pasado del 59,65% de 2019 al 65,92% en 2023. La abstención ha bajado en 10.000 personas. Han votado 113.454 personas y en 2019 fueron 101.981. Curiosamente, el número de votos nulos y en blanco ha aumentado. Se ha pasado de 1.022 votos en 2019 a 2.008 en 2023, una subida de casi el 100%. Preocupante. Añádase a ello que casi 6.000 votos a Ilicitanos por Elche y Partido de Elche han quedado huérfanos al no presentarse ambos, y que casi otros 10.000 son los que Ciudadanos y Podemos han perdido entre ambas convocatorias.

Ello ha generado una enorme bolsa de votos que se han repartido las fuerzas que han entrado al Ayuntamiento. El PSOE, unos 6.000, el PP casi 14.000 y Vox 6.800. Curiosamente, Compromís no sólo no ha ganado ni un voto sino que, encima, ha perdido más de 400. Y, peor aún, a su candidata local la votan 2.000 personas menos que a su candidata autonómica. Puede que haya varias razones para ello, pero el hecho de no favorecer la confluencia con Podemos, que hubiera incentivado mucho más el voto sobre el que realmente ambos han percibido por separado, y una política contradictoria con promesas anteriores, y demasiado supeditada al PSOE parecen estar detrás de los resultados.

El próximo día 17 Pablo Ruz será alcalde. Tiene varios retos y promesas pendientes y muchas no pueden esperar. Muestra un talante diferente a otras épocas, lo que es positivo. Debe demostrar rápidamente su capacidad de cumplimiento. Elx es muy diversa y abierta y se le debe tratar sin sectarismos ni retrocesos. Si así lo hace podrá aspirar a repetir, de lo contrario su mandato será tan breve como el de 2011 y Elx habrá perdido otros cuatro años y sería lo que nos faltaba.