Homenaje a Teresa Alonso

Es inevitable, cada vez que pensamos en un hospital, imaginar las habitaciones de ingreso, las consultas o los quirófanos, atendidos por profesionales sanitarios como los médicos o el personal de Enfermería. Sin embargo, cualquier hospital es mucho más complejo que todo eso. Necesita ser, entre otras cosas, un gran hotel y un enorme edificio de oficinas y servicios generales, los cuales resultan imprescindibles, además de los servicios sanitarios. En este ámbito, que podríamos denominar la Dirección de Gestión y de los Servicios Generales, ha tenido un papel esencial nuestra protagonista.

Sin hacer mucho ruido, discreta y eficaz como ha sido ella, aguantando hasta los 66 años porque todos se lo pedían, se nos ha jubilado hace unos días la directora económica del Hospital, Teresa Alonso Romero. Quizá temblaron algunos cimientos del hospital cuando llegó a un puesto tradicionalmente masculino esta madrileña hecha a sí misma que ha recorrido desde abajo todos los puestos de la administración hasta llegar a lo más alto. Ganó las primeras oposiciones como auxiliar administrativo ya en 1984, y en los hospitales de Xàtiva y Villajoyosa fue demostrando su valía hasta llegar a Jefa de Personal. Estudió en sus ratos libres la carrera de Derecho, y así llegó en 2006 al Hospital de Elche como subdirectora económica, avalada por una sólida reputación.

Trabajadora incansable, luchadora, directa y exigente consigo misma y con sus equipos, activa y tenaz. Hubiera podido desarrollar con nota su trabajo en cualquier consejo de administración de una gran empresa, pero eligió pelearse por la sanidad pública. Buena parte de las transformaciones que ha tenido el hospital en los últimos 19 años la han tenido a ella como protagonista.

Para empezar, desarrolló plenamente los servicios y las competencias profesionales de las 506 profesionales no sanitarias que trabajan hoy en el Departamento de Elche-Hospital General. Aunque a veces no pensemos en ellos, es fundamental para un hospital que funcionen muy bien todos los servicios generales, como: Celadores, Informática, Mantenimiento, Hostelería, Suministros, Almacén, Archivo, Biblioteca, Cocina, Lencería, Personal, Nóminas, Contratación, Facturación, Gestión Económica, Servicios Jurídicos, Registro o Trabajo Social, entre otros. Ha gestionado también con eficiencia los contratos con empresas externas, fundamentales para el hospital, como limpieza, seguridad, restauración, cafeterías y mantenimiento.

Grandes inversiones en estructuras del hospital han sido también posibles bajo su mandato, como el Edificio Anexo 2, la moderna remodelación de la UCI y las Urgencias, los hospitales de día de Hemodiálisis y de Urología, el gran edificio de la Unidad Integral de Atención Ambulatoria (UIAE), la reforma del hall de entrada del hospital o el Centro Integrado de Salud de Santa Pola. Otras importantes transformaciones se han hecho realidad, aunque sean menos visibles, como la transformación «verde» del hospital, los modernos aparcamientos, la informatización de todos los procesos o la digitalización de las historias clínicas.

Ha abordado también la rehabilitación y modernización de prácticamente todas las plantas y áreas comunes del hospital, que lucen como nuevas tras un trabajo en equipo admirable, realizado junto a Marina Martínez, la ingeniera de Mantenimiento, y Mª Jesús Llamas, jefa de Personal y su sucesora en el cargo. Para todo ha llegado milagrosamente el dinero, fruto de una inmejorable administración. Todavía recuerdo su despacho en 2020, en plena pandemia del covid, lleno hasta arriba de suministros y materiales de protección para el personal sanitario, que ella buscaba entre todas las empresas y donantes voluntarios.

Esta nota es para agradecerte, Teresa, como tú te mereces, tu esfuerzo de tantos años. Te deseamos lo mejor para esta nueva y merecida etapa de tu vida. Que disfrutes mucho con tus amigos y con tus dos hijos, Marina y Diego, de esas caminatas de marcha nórdica que tanto te gustan, de los amigos y de la comida sana. Te echaremos de menos.