Opinión | Opinions des d’Elx

¿Se acuerda alguien de que lo de Correos sigue pendiente?

La antigua sede de Correos, con el cartel  del Learning Factory, aunque el edificio sigue cerrado.

La antigua sede de Correos, con el cartel del Learning Factory, aunque el edificio sigue cerrado. / Áxel Álvarez

No tiene suerte Elx con las inversiones que dependen de otras administraciones. Y da igual que sean del PSOE que del PP. Se pintan solos a la hora de prometer y, después, siempre hay una excusa para ir dilatando la realización de aquello que prometieron.

Uno, entre los múltiples ejemplos posibles, es el del antiguo edificio de Correos sito en el Paseo de la Juventud. El 20 de junio de 2018 se anunció su compra, por la Generalitat, por unos 800.000 euros, según comunicó Ximo Puig. Y, además, nos dijo que era la primera compensación que se le hacía a Elx en referencia a los 43 millones de euros que habíamos tenido que soportar para la instalación, en época del PP de Zaplana y como requisito previo, de la UMH en nuestra ciudad. Una verdadera muestra de «cariño» que ya, en aquella época, nos dedicó el PP que dirigía aquel «fenómeno» que, años después, acabaría en la cárcel por sus chanchullos financieros con Hacienda y que tanto afectaron a los valencianos. Y es que una cosa es llevar la banderita en la muñeca y alardear de patriotismo y otra, cumplir con sus obligaciones de buen gobierno de las que tan alejado siempre estuvo. Algo bastante habitual en la época y no demasiado raro en la actual.

Junto al anuncio de la compra también se prometió una inversión, en el presupuesto de 2019, de 8.000.000 euros para la adecuación del edificio y la instalación en el mismo del Centro Internacional de Calidad y Diseño de Moda y Calzado. De ese presupuesto millonario nunca más se supo. Y de que era para compensar por lo de la UMH pronto quedó claro que era sólo palabrería. En esas mismas fechas se fueron comprando los edificios de Correos de Valencia, Alicante, Castellón, etc., y no había allí ningún compromiso de compensación. Se quiso engañar a Elx con aquellas declaraciones de Ximo Puig. Ya se sabe que se coge antes a un mentiroso que a un cojo.

Pasaron los años y de aquel Centro de Diseño y Moda no había noticias. Llegó una nueva consellera, Carolina Pascual, y se anunció un nuevo invento. Ya no sería lo prometido, ahora sería una Learning Factory que, según decían, era mucho mejor y que posicionaría a Elx en el mundo mundial en innovación.

Pasaron más años sin que se hiciera nada y, en eso, llegó a la Generalitat ese otro fenómeno llamado Carlos Mazón, que ya fue discípulo de Zaplana en su momento, y que pasará a la historia como el hombre que prefirió no perderse una comida con una mujer, antes que atender los problemas de los valencianos el día de la dana, con los trágicos resultados que todos conocemos. Y en octubre de 2023 visitó Elx la nueva consellera del PP, Nuria Montes, responsable del tema. Una persona que, por sus palabras tan vergonzosas sobre los familiares de las víctimas de aquella dana, tuvo que ser cesada sin que el que la nombró, Mazón, entonara ninguna autocrítica ni pidiera perdón por ello. Se nota que están a otras cosas.

En la visita que la señora Montes hizo al edificio de Correos, acompañada por el alcalde Ruz, tan sólo anunció un posible uso de formación profesional, como siempre se había dicho, y delegó en el Ayuntamiento para que, de común acuerdo, se pensara algo sobre el mismo. Nada nuevo, reiteró anuncios de años anteriores.

Y, en octubre de 2023, la junta de gobierno local aprobó una modificación puntual del PGOU al objeto de permitir un cambio en la calificación del solar. Pasaría de un uso de Infraestructura Servicio Urbano a uno Educativo-Cultural así como Administrativo y, además, se permitirían más alturas. Todo ello para posibilitar actividades de investigación y formación en determinados sectores, según conclusiones de un estudio de mercado que se había realizado con anterioridad.

La realidad, más de seis años después de que se acordara adquirir dicho edificio, es que allí no se ha hecho nada. Es verdad que la mayor parte del tiempo perdido corresponde a la época del Botànic, pero ya llevamos más de año y medio con Mazón y tampoco se concreta nada, y el ejemplo que se está dando a la ciudadanía es lamentable con respecto a la gestión de la inversión y el patrimonio público.

Es hora de que se avance, de verdad, en dar un uso responsable a este edificio. A Elx le conviene que se empiece a utilizar y que se dé un servicio a la población. A veces da la impresión de que se han olvidado de que está ahí o, peor aún, de no saber qué hacer con él.

Y el problema gordo de verdad es que en Elx abundan situaciones similares. Por ejemplo: el solar del Palacio de Congresos empieza a acumular antigüedad, lo prometió César Sánchez, del PP, en 2018, y no se ve mucho interés por parte de Diputación en avanzar en su edificación. Y ya veremos lo que se tarda en empezar a hacer algo en las recientemente adquiridas instalaciones de la Fundación Mediterráneo en la Glorieta que en tan delicado estado se encuentran y que, cuando se anunció su compra, en julio de 2023, el todavía presidente de la Diputación, Carlos Mazón, dijo que allí estaría la sede de la misma en Elx. Estupendo. Es cierto que aún no ha pasado mucho tiempo de aquel anuncio, de momento, pero escasean las noticias sobre el mismo.

En definitiva, Elx merece más atención por parte de las instancias superiores, Generalitat, Diputación o el propio Estado, y hay que exigirla si ésta no llega. Y ahí el Ayuntamiento debe ser más exigente. Entre cambio de farolas y colocación de flores hay que buscar tiempo para recordar que, a efectos de poner en marcha inversiones, Elx también existe.

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